Si las condiciones climáticas lo permiten, el ciclo agrícola 2019/2020 dejaría una producción de 26 millones de quintales de granos básicos, indicó ayer el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

El MAG comenzará el próximo 22 de abril la entrega de los paquetes agrícolas de maíz y lo hará de forma simultánea a nivel nacional, con “la esperanza” que en la región occidental, central y parecentral “las lluvias inicien en mayo”, dijo Orestes Ortez, titular del MAG.

Esto implica un cambio en la logística de años anteriores, cuando el MAG entrega los paquetes agrícolas de oriente -Usulután, San Miguel, Morazán y La Unión- a mediados del ciclo agrícola los paquetes para la zona oriental.

“Vamos a hacer una sola entrega porque interrumpir el proceso puede generar dificultades a los agricultores. Vamos a hacer un solo esfuerzo para tratar de que quede la gente con su paquete y no haya retardos”, aseguró el funcionario.

Para la cosecha 2019/2020 se espera entregar 422,477 paquetes agrícolas, que equivalen a una inversión de $17.2 millones. De ese monto, $9.9 millones se dirigieron a la compra de semilla de maíz y $7.1 millones a la adquisición de fertilizantes.

En tanto, los paquetes de frijol se entregan hasta mediados del año y el MAG ya inició la licitación para la adquisición de los insumos con un presupuesto de $4.45 millones.

Los pronósticos del clima para 2019, del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), apuntan a que en mayo próximo iniciará la temporada lluviosa, aunque en “el oriente siempre va a entrar retardado el invierno y posiblemente en julio tengamos de nuevo una canícula de consideración”, comentó Ortez.

En este momento, sobre el suelo salvadoreño se desarrolla el fenómeno de El Niño en su fase moderada. En anteriores declaraciones del MARN a Diario El Mundo, se advirtió del riesgo de una nueva sequía a inicio de la temporada lluviosa, debido a que las nubes se hacen menos espesas y la recolección de agua es menor.

“Los agricultores de oriente tienen que esperar al período de postrera, de lo contrario vamos a repetir el ciclo de pérdidas de cultivo que podemos prevenir si tomamos en consideración los pronósticos que nos da el sistema nacional”, agregó Ortez.

El año pasado, el sector agrícola se enfrentó a una de las sequías más severas de las últimas cuatro décadas, con una ausencia de lluvia de hasta 40 días en algunas zonas del país, en particular de la región oriental.

Ortez destacó ayer que “no hubo desastres”, como desabastecimiento de granos básicos en el mercado, porque, aseguró, solo el 10 % de los agricultores con paquetes agrícolas en la zona oriental cultivaron a inicios del período lluvioso.

El informe de pérdidas por sequía, obtenido el año pasado por Diario El Mundo vía la Ley de Acceso a la Información Pública, reveló que la sequía ocasionó la pérdida de 2.7 millones de quintales de maíz, 28,207 de frijol, 16,689 de sorgo y 14,867 de arroz.