“Si un bono valía $100 y ahora vale $90, quiere decir que aumentó la posibilidad de que no me paguen”, explicó Waldo Jiménez, gerente económico de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP). Sostuvo que si el inversionista que tiene el título lo conserva hasta su vencimiento, eventualmente recibirá el valor que se comprometió el emisor (en el plazo acordado), pero si quiere venderlo, quien lo compra, le dará un precio menor porque exige una tasa de interés mayor por el riesgo de impago.
“Eso no afecta al país en su flujo actual porque el país tiene que seguir pagando, pero el gobierno de El Salvador tiene varios millones autorizados para tomar nueva deuda, pero esa nueva va a recoger ese aumento del riesgo y entonces para comprar un título que valga $100 te dirá: ‘te cobro 15‑% de tasa de interés’”, valoró el miembro de ANEP.
El Salvador tiene varios millones autorizados para tomar nueva deuda, pero esa nueva va a recoger ese aumento del riesgo”. Waldo Jiménez, gerente económico de ANEP
Jiménez dijo que el efecto para el Gobierno es a futuro, pero este se refleja de manera más inmediata para quienes tienen créditos en el sistema financiero local.
“Ese aumento de riesgo se traduce en la tasa de interés de los productos que tenemos contratados”, explicó.
La economista Karla Guzmán respalda ese punto. Agrega que “al final hasta los consumidores y las empresas percibirían los resultados de ofrecer tasas de interés altas, porque para el país se irán complicando las opciones de nanciamiento en el mercado internacional y también para garantizar liquidez interna”.
Destacó que si no se hacen ajustes, como un ordenamiento de las finanzas públicas y se disminuye la incertidumbre en el manejo de las decisiones económicas y políticas, será complicado asumir los compromisos de deuda y será más costoso el financiamiento.
Escenarios para la deuda
- Deterioro
En condiciones adversas los inversionistas buscan deshacerse de los títulos con más riesgo, mientras mayor el deterioro es más costoso hacerlo.
- Fragilidad
En el caso de El Salvador, la pregunta que salta entre los inversionistas es si el país será capaz de poder responder si el deterioro continúa creciendo.
- “Buitres”
Estas condiciones atraen a inversionistas de riesgo, conocidos como “fondos buitres” que exigen tasas mayores por el soporte financiero.
- Saneamiento
Un acuerdo con el FMI permitiría sortear los riesgos, pero también exigiría medidas fi scales para garantizar su cumplimiento, algunas veces impopulares.