La automotriz alemana Porsche espera que para 2025 la mitad de las ventas de autos deportivos en la región Centroamérica y el Caribe sea de autos eléctricos.

La compañía con sede en Stuttgart tiene metas altas para la introducción de la electromovilidad en la gama alta, ya que espera que para 2030 el 80 % de sus autos cuenten sean "cero emisiones".

Porsche destacó que no solo sus autos serán más eficientes, ya que también sus proveedores se han comprometido a establecer una cadena de suministro de emisiones cero, desde la extracción de minerales, producción de materiales y transporte, hasta todo el ciclo de vida de los autos.

Alianzas en marcha


Vicente Díaz, gerente comercial de Porsche, dijo que el alto volumen previsto requerirá del desarrollo de una infraestructura de carga adecuada.

Además del desarrollo de estaciones para el hogar (donde se realiza el 64 % de las recargas), la marca anunció que trabaja en el despliegue del Porsche Destination Charging, que es una red de carga pública que la empresa desarrolla mediante alianzas con restaurantes, centros comerciales, clubes y otros sitios, donde se lleva a cabo el 25 % de las cargas.

Adelantó que la tercera herramienta del fabricante alemán para permitir a sus clientes recargas son los Porsche Charging Services, los cuales se harán mediante alianzas para la construcción de electrolineras.

El alto volumen de ventas previsto implicará una demanda mayor de de baterías de alto rendimiento. Porsche, a través de sus filial Cellforce Group (CFG), eligió a BASF para desarrollar celdas para las baterías de iones de litio de próxima generación.

“Esa alianza comenzará a dar frutos a partir de 2024, cuando la planta esté en capacidad de producir al menos 100 MWh por año, lo que servirá para impulsar 1,000 vehículos, entre modelos de competición y deportivos de altas prestaciones”, dijo Díaz.

Simultáneamente Porsche trabaja en otros frentes para ayudar al medio ambiente. Uno de ellos es la producción de combustibles sintéticos (e-fuels).

“Junto a Siemens Energy y otras empresas internacionales ya comenzamos en Punta Arenas, en el sur de Chile, la construcción de una planta industrial para la producción de este tipo de combustibles que son prácticamente neutro en CO2”, finalizó Díaz.