Este viernes se presentaron las perspectivas del clima de Centroamérica para el trimestre de mayo a julio, resultado de las discusiones sostenidas en el Foro del Clima de América Central y el Foro Hidrológico de América Central, que se desarrolló en la sede del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).
En dicho encuentro regional se presentaron los resultados de las evaluaciones atmosféricas y del comportamiento y estado actual del océano, así como el pronóstico de las condiciones oceanográficas y las variables que se esperan prevalezcan en la atmósfera en el próximo trimestre.
Las autoridades de meteorología y climatólogos ponen especial atención al desarrollo del fenómeno de El Niño y La Niña por sus efectos en la población y sectores productivos.
El fenómeno de El Niño ocurre cuando las aguas del Océano Pacífico se calientan, mientras que La Niña se genera al combinarse un calentamiento del Atlántico con un descenso de las temperaturas en el Pacífico.
Los ejercicios climáticos indican que, debido a la presencia de El Niño sobre el territorio salvadoreño, existe la posibilidad de que ocurra una sequía meteorológica débil o moderada en la zona oriental y costero central en la segunda quincena de junio, informó Celina Kattan, directora del Observatorio Ambiental del MARN.
Además, se pronostica otra sequía meteorológica débil o moderada en las dos últimas semanas de julio y principios de agosto próximo.
Kattan explicó que este fenómeno será diferente a la sequía de 2018 porque el período seco del año pasado respondió al enfriamiento súbito en el Océano Atlántico junto al incremento en la temperatura del Pacífico.
La sequía del año pasado se consideró como una de las más extremas, porque se prolongó hasta 40 días en algunas regiones.
Esta ausencia de lluvias dejó $42.3 millones en pérdidas por la afectación de 2.8 millones de quintales de granos básicos, según datos recolectados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) durante el año pasado.
Comenzó en 2018
Berta Olmedo, secretaria ejecutiva del CRRH, destacó que los primeros indicios sobre el desarrollo de El Niño se observaron en octubre de 2018, pero fue hasta febrero de 2019 que se logró un acople pleno entre las condiciones del Océano Pacífico Tropical y las reacciones de la atmósfera.
“Tenemos un fenómeno de El Niño maduro”, con 74 % de probabilidades de que persista entre mayo y julio y 66 % para junio y agosto próximo.
Esto “afectará en algunos países el inicio de la temporada de lluvia” porque “la temperatura en el océano se mantendrá cálida, por lo menos durante el trimestre de la perspectiva”, indicó la vocera.
Belice será el más afectado a nivel regional, pues se esperan precipitaciones por abajo de lo normal en todo su territorio y le sigue El Salvador con escenarios de lluvia inferiores al promedio en la zona central y oriental, así como se pronostican condiciones normales para la región suroccidente en Santa Ana, Ahuachapán y sur de Sonsonate, agregó la experta.
