Si no se presenta ningún inconveniente, en agosto próximo iniciarían las acciones de campo del proyecto de aumento de resiliencia climática en los agroecosistemas del corredor seco de El Salvador (Reclima), informó ayer Diego Recalde, representante país de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO).
El diseño de Reclima comenzó en 2016 con estudios, diagnósticos y consultas, aunque fue hasta octubre de 2018 que el Fondo Verde del Clima (GCF, por su sigla en inglés) aprobó el proyecto y se comprometió a donar $35.8 millones, que se sumarán a una contrapartida estatal de $91.8 millones.
Por el lado de El Salvador, el Ministro de Agricultura y Ganadería (MAG) asignará $74.3 millones y otros $3.7 millones del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), además de un aporte del Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador (Fiaes) de $13.8 millones.
La agencia de Naciones Unidas y el Fondo Verde concretaron el compromiso de la donación en abril pasado. En tanto, la FAO y el Gobierno salvadoreño firmaron ayer el convenio de implementación del proyecto que durará cinco años.
La suscripción del convenio se realizó con la firma de Carlos Castaneda, ministro de Relaciones Exteriores; Orestes Ortez, titular del MAG; Lina Pohl, ministra de Medio Ambiente; Jorge Oviedo, director ejecutivo de Fiaes; y el representante de la FAO en El Salvador.
El canciller indicó que con ello se designa a FAO como la entidad encargada de ejecutar el proyecto y proporcionará asistencia técnica al Gobierno de El Salvador, además determina las responsabilidades de las entidades gubernamentales durante el período de duración. “Esta iniciativa es emblemática para El Salvador, ya que esta propuesta tiene características especiales y específicas relacionadas a la adaptación climática en el país y del bienestar de cerca de 225,000 personas”, agregó Castaneda.
Recalde aseguró que ya trabajaron en las actividades de “arranque” desde la firma con el Fondo Verde y “la expectativa para nosotros es agosto” de iniciar las actividades de campo.
¿En qué consiste?
Reclima se ejecutará en los 114 municipios situados en el corredor seco de El Salvador y pretende recuperar 17,000 hectáreas de ecosistemas degradados y aumentar la resiliencia en los sistemas productivos de 56,000 hectáreas.
Además, contempla la erradicación del hambre, apoyar a agricultores familiares con infraestructura básica y conocimientos técnicos de sistemas alimentarios sostenibles y resilientes, así como incorporar nuevas prácticas productivas y mejorar el acceso de agua de 4,000 familias a través de la captura, almacenamiento y distribución del agua lluvia.
La agencia de las Naciones Unidas prevé involucrar a 20,000 personas de la comunidad indígena y 50,000 agricultores familiares, que equivale al 15 % del sector agropecuario del país y un 38 % de los beneficiados representará a familias liderados por mujeres.