Los datos revelan que entre enero y julio El Salvador inyectó 726 gigavatio por hora (GW/h), que serían 361 GW/h más si se comparan a los 365 GW/h reportados en 2016, durante el mismo período.
Juan Ceavega, gerente de Energía de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), manifestó ayer que “hemos tenido una suerte que se ha estado importando más energía a un precio más barato que la térmica”, que ha contribuido a precios más baratos durante los últimos períodos de sequía.
Señaló que a los generadores y comercializadores se les adeuda mes y medio por la falta de pago al subsidio energético. “Si los comercializadores ya no tienen dinero para pagar la energía que compran cómo van a seguir trayendo, quién les va a vender”, añadió el experto.