Estados Unidos decidió retirar los Cuerpos de Paz, voluntarios que trabajan en nuestras comunidades y que pueden palpar objetivamente, a diario en su convivencia con salvadoreños, la situación de criminalidad y violencia que vivimos.
Luego vendrían las alertas de viaje de Estados Unidos y Holanda, pero si uno revisa las páginas web de los ministerios de Relaciones Exteriores de toda la Unión Europea, las recomendaciones son más o menos similares: El Salvador es inseguro, la violencia de las pandillas ataca hasta los policías, hay asaltos en los buses, semáforos y carreteras y hay un elevado nivel de impunidad. Nada que no sepamos los salvadoreños pero que para un visitante extranjero puede ser suficiente para tomar la decisión de no venir.
La comunidad internacional históricamente nos ha apoyado en nuestros problemas y lo sigue haciendo en este momento, pero la solución depende de nosotros los salvadoreños, gobierno y sociedad civil. Estamos entre los países más violentos del mundo y eso es un hecho vergonzoso que tenemos que cambiar.