Pepe Garza, reconocida figura mexicana de radio, esperó siete años para revelar una entrevista exclusiva que le dio la 'Diva de la Banda', Jenni Rivera, antes de morir.

Garza dio a conococer el audio a Chiquis y Johnny, los hijos de la cantante, fallecida en un accidente aéreo el pasado 9 de diciembre de 2012. En este audio, grabado en julio de ese mismo año que murió, Jenni confesó haber sufrido amenazas de muerte.

Según Garza, la intención de Jenni eran "dejar un testimonio por si algo le ocurría" y que él por cuestión de seguridad, no lo divulgó cuando Rivera murió.

En la grabación, la intérprete de "No llega el olvido" cuenta que fue contactada por el FBI en julio porque ellos tenían información que existían amenazas de muerte en su contra y estas se concretarían en el concierto que ofrecería el 29 de julio en Reynosa, Tamaulipas, México.

"Me comuniqué con el agente y me dijo que había recibido una llamada de una persona con mucha credibilidad en Reynosa, Tamaulipas, que hay rumores, no rumores sino que es una realidad de que Jenni Rivera será secuestrada este fin de semana en Reynosa, Tamaulipas", narró.

Entre sollozos se escucha decir que a pesar que no tenía problemas con nadie, estaba "intranquila" por esta situación y que por ello había pedido a su esposo Esteban Loaiza que se quedara con sus hijos por si algo le sucedía.

"Mi negocio no es nada ilícito, es algo honesto, me esfuerzo mucho para trabajar, no me meto con gente ni con bien ni mal. Yo sí quisiera que la gente supiera que si cuando han ido persona a mis palenques, a mis presentaciones, diferentes grupos o carteles que me piden que los atienda con una fotografía; no me niego, ahí estoy, yo me tomo fotos con ellos y los trato con mucho respeto, incluso. No hay problemas con nadie, no hay ningún problema con nadie, con ninguna agrupación, con ningún cartel, con nadie", afirma.



Sin embargo, dijo que un año antes antes de presentarse en la Arena Monterrey, recibió un "tuit" donde le decían que si subía a cantar Los Zetas la iban a matar. "Apagué mi teléfono y me subí a cantar. Sí me sentí mal físicamente, te pones tensa, te estresas, pero me subí a cantar y me fue muy bien. En otras ocasiones en Michoacán mis fanático me han dicho habían rumores aquí que me iban a cortar la cabeza y no nada más es conmigo, es con cualquiera, con muchos artistas", sostuvo.

Incluso, contó que Univisión le llamó a su disquera por un comentario que habían dejado en su sitio web, en el que decían que no asistiera a su concierto en Tamaulipas porque la iban a matar. Manifestó que en otra ocasión no pudo cantar en Reynosa y tuvo que esconderse en una camioneta porque se armó un alboroto en el lugar donde se presentaría, ya que se dijo que habían hombres armados.

Sus hijos afirmaron que su madre nunca les contó esta cosas, lo cual, consideraron, fue para no preocuparlos.

"Soy una mujer muy valiente, muy decidida y por eso estoy aquí. Nadie sabe, incluso, ni mi familia sabe. Sabe usted Pepe Garza. No saben mis amigos, no saben mis compañeros, nos sabe nadie de esto y así lo he decidido yo porque no quiero asustar a más gente, no necesitamos más intranquilidad en el mundo. Me voy a ir a trabajar, estoy pensando dejar a mi esposo con mis hijos, que él me encuentre en Monterrey el sábado y creo en un Dios todopoderoso que como me ha sacado adelante de muchas cosas, que me va a sacar de esta también y que yo le sirvo más a Dios viva que muerta, que quiero a mi público y que por eso, con todo respeto, quise dejar esto grabado con usted que aquí empezó Jenni Rivera y si va a terminar, aquí va a terminar", finaliza la entrevista.

Por todos estos incidentes, Jenni comentó a Garza que planeaba dejar la música para dedicarse su programa de radio y de televisión y estar más tiempo en su casa, con su familia.