Uno de los elementos que caracterizan a la saga de "Expediente Warren" (The Conjuring) es la presencia de terroríficos entes y criaturas demoníacas que aparecen en sus películas, únicos en habilidades y con un diseño que fascina y aterroriza a partes iguales.
Annabelle, la Monja, el Hombre Retorcido o la Llorona son algunos de estos entes que han podido verse en entregas anteriores y que dotan de personalidad a cada una de las películas. La tercera parte de The Conjuring, "Expediente Warren Obligado por el demonio", también iba a contar con uno de estos seres, sin embargo, fue finalmente eliminado por completo del filme.
En declaraciones a Cinemablend, el director Michael Chaves, reveló que la película incluía a una aterradora criatura que contaba con gran aceptación por parte del equipo creativo. Sin embargo, el realizador de la cinta explicó que se prefirió sacrificar al personaje para dotar de mayor cohesión al resto de la narración, basada en un hecho real.
"Teníamos un personaje demoníaco en este película que hemos acabado quitando. Y era el tipo de personaje que podría haber tenido fácilmente su propia película", ha explicado Chaves.
A la gente le encantaba, pero complicaba mucho las cosas. La película es, en última instancia, de misterio, necesita una resolución". Michael Chaves
Chaves explicó que era ese tipo de personaje que deja a los espectadores con dudas y que han preferido guardarlo para otra ocasión a presentarlo de cualquier manera pensando solo en sacar más películas sobre él a posteriori.
Esta explicación recuerda en gran medida a lo sucedido en la segunda película de la saga, donde se presentó a los personajes de la Monja y el Hombre Retorcido, sin que tuvieran realmente un desarrollo comprensible durante el filme. En su lugar, ambas apariciones parecían simplemente destinadas a generar expectación para futuros spin-offs.