Hugo VIllarroel es médico de profesión y escritor por convicción. / Cortesía
No hace falta ser el director de un circo para presentar el espectáculo digno de uno: cada ser humano se enfrenta al mundo con un personaje improvisado a fuerza de la costumbre. Ese circo personal es el que Hugo VIllarroel, médico de profesión y escritor por convicción, esboza en su más reciente libro, “Bienvenidos a mi Circo”.
El autor salvadoreño presentó la obra en las instalaciones del Teatro de la Universidad Alberto Masferrer, su Alma Máter. Esta vez, una compilación de cuentos se suma a la bibliografía del médico, que apoyado de su experiencia con pacientes y demás personas, decide empuñar la pluma por séptima vez, después de publicar tres libros de medicina, dos novelas, y un cuento infantil.
“La ficción es escapismo y divertimento a la vez. El cuento requiere de más oficio, es exigente: en cierta época de mi vida, necesitaba explorar historias cortas y darles remate rápido. Me sentía urgido y deje de pensar y me puse a escribir”, explicó el escritor, quien además se ha dedicado a la medicina por más de 30 años.
La obra es una compilación de 11 cuentos, uno de ellos escrito por el hijo del autor, Eduardo Villarroel. La primera edición cuenta con el respaldo de la Editorial de la Universidad Alberto Masferrer (USAM).
“El médico recibe todo el caudal de dolor y angustia que sus pacientes le comparten... Luego el corazón se desborda en poesía, fantasía, la ilusión de crear microuniversos en donde ya no hay nada que temer”, agregó.
La incursión de Villarroel en la escritura, al menos de forma pública, comenzó con la publicación de su primera obra, “En el nombre de David” (2004), una novela de ficción, catártica, que precedió a sus próximas publicaciones “Otra vuelta de Tuerca” (2009), y el infantil “Goveia viaja a Timbuctú” (2009).
