Lucrecia Chinchilla es la arquitecta que pasó de diseñar casas y edificios a pintar lo que ella llama “emociones y sentimientos”.

De pequeña asistió a diferentes cursos y talleres de dibujo y al llegar a la universidad, a parte de sacar su arquitectura, tomó cursos de artes plásticas.

Durante la cuarentena empezó a pintar para desestresarse y empezó a usar la técnica geométrica (low poly) que se convertiría pronto en parte de su sello, cuenta Chinchilla. “Empecé a pintar, buscaba referencias de repente de dibujos que me gustaban y encontré esta técnica”.

“Me llamó tanto la atención que vi videos y cómo es que en realidad lograban a través de formas geométricas, poder ver de lejos las mismas ilustraciones, investigué un poco más de eso y empecé a intentarlo y la verdad no se me hizo difícil por lo mismo de tener los conceptos de la teoría del color, y todo eso”.

Aunque al principio empezó pintando para su familia y tener cuadros en su casa, luego sus pinturas se viralizaron a través de redes sociales (@lu_chinchilla en Twitter). Fue entonces que la gente se interesó en en comprar sus pinturas y a la fecha lleva poco más de 200 cuadros pintados, desde que comenzó en marzo de 2020.



La mayoría de pedidos que recibe es de pinturas de mascotas, “quizás el 70%”, asegura Quintanilla, y en especial de perritos, que muchas veces ya fallecieron. Aunque también ha tomado a bien pintar retratos de personas.

En las pinturas de mascotas hay muchas veces en que por la naturaleza del pelaje colorido, Lucrecia llega a utilizar hasta más de treinta colores diferentes.

“En el transcurso que voy pintando voy mezclando los colores hasta que estoy satisfecha con el color que me representa la foto”. Aclara que debe tener el cuidado que un color no se pase a otra figura geométrica.

Además, explica que si en todo caso no logra acercarse al color deseado se auxilia de lo digital. “En Photoshop veo el tono y le dice a uno cuánta cantidad de tanto tiene que llevar (…) pero después de tantos cuadros ya es casi que al ojo”.



Sobre sus pinturas ella describe: “No es solo un retrato, sino que son momentos de las personas. La capacidad de generar emociones positivas en la gente es lo que realmente a uno lo mantiene”.

Quintanilla siempre ha estado relacionada al arte, pues es hija de un escritor y de siempre ha ido a galerías de arte.

 

El dato


Lucrecia Chinchilla manifestó que le gustaría que existieran más espacios en el país para que pudieran haber otro tipo de expresiones del arte.