La banda española de folk metal Mägo de Oz las pasó negras en Bolivia: suspendió un concierto, prorrogó otro por fuertes lluvias y sufrió la detención policial de su mánager y dos músicos, denunciados por el promotor local por incumplimiento de contrato.

“Todos estamos bien (dentro de lo posible) y estamos intentando olvidar esta mala experiencia”, dijo la banda en su cuenta oficial en Facebook, desde Ecuador, adonde llegaron los músicos procedentes de tierras bolivianas.

Mägo de Oz, que realiza una gira latinoamericana por su 30 aniversario, llegó a Bolivia la semana pasada para hacer varias presentaciones en Santa Cruz (este), La Paz y Potosí (suroeste).

En Santa Cruz se realizó sin problemas, en La Paz fue a medias por un temporal y en Potosí se suspendió y fue prorrogado para el domingo 10, aunque en La Paz.

Además, el segundo concierto, el de La Paz, titulado “Diabulus in Opera”, debía contar con el acompañamiento de una orquesta filarmónica y una coral, lo que no aconteció por causas no suficientemente explicadas.

El sábado, Gustavo Tobar, el promotor del evento en Bolivia, denunció a la banda por “estafa a víctimas múltiples” y logró que la policía local detuviera a la mánager Lidia Ibón Cruz, al violinista Carlos Prieto y al director y baterista Jesús María Hernández, conocido como Txus di Fellatio, informó el diario boliviano Página Siete.

Todos recuperaron la libertad posteriormente.

Mägo de Oz prometió revelar más adelante los entretelones de esas detenciones. “Os contaremos la verdad de lo que este impresentable de Gustavo Robar (sic) y su equipo nos hicieron pasar”, escribieron en Facebook.

Tobar dijo a la prensa local que la banda española “tiene un discurso muy hipócrita” y que no había motivos para suspender el espectáculo de Potosí.

“Mägo de Oz no llega nunca más a Bolivia (...) no van a volver”, dijo el promotor y gerente de la empresa Fm Producciones, quien acotó que se sentía engañado y estafado “y por eso los demandamos y metimos presos a la gente que no cumple su palabra”.