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Victoria Beckham presentó discretamente su colección otoño/invierno 2018 en Nueva York este domingo, antes de volver a Londres para el décimo aniversario de su firma.
La antigua Spice Girl, emprendedora y madre de cuatro, rompió con su formato tradicional para dar paso a lo que llamó "una discreta celebración de lo que hemos alcanzado", desde sus primeras presentaciones en Nueva York hace una década.
Su marido, David Beckham, y tres de los cuatro hijos de la pareja vieron el desfile desde la primera fila. Al final, Victoria apareció para recibir los aplausos -vestida elegantemente con pantalón y suéter negros- y en un gesto inusual se dirigió hacia donde estaban los miembros de su familia para darle a cada uno un rápido abrazo.
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La colección presentó una estructura por capas, dirigida a la mujer trabajadora, para la temporada otoño/invierno, con atuendos estilo trajes de safari, cuellos abotonados, grandes cinturones y enormes bolsos, llevados al hombro y colgando medio abiertos.
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También mostró bufandas con dobladillos y algunas piezas con "animal print" para romper el patrón de colores oliva, arena, marrón, gris y negro.
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Los zapatos eran bajos, con tiras que caían de ellos, para una colección con una claro aire londinense, más bien austera y ligeramente andrógina.
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Beckham optó por una imponente mansión del Upper East Side neoyorquino para presentar su colección, en lo que describió como "un lugar más íntimo que permite que la construcción y los detalles de las prendas sean vistos desde una nueva perspectiva".
La siguiente temporada, Beckham dejará Nueva York para celebrar en Londres el décimo aniversario de la firma que la transformó en una diseñadora admirada por editores y con seguidores leales, luego de ser una estrella del pop en los años 1990.
Ella y las otras cuatro integrantes de Spice Girls --Melanie Brown, Emma Bunton, Melanie Chisholm y Geri Horner-- se reunieron en Londres la semana pasada y anunciaron su intención de volver a trabajar juntas.