Pero ¿por qué tanto miedo al virus? Según la sicóloga del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Nadia Guevara, temerle a lo desconocido –en este caso una enfermedad- es completamente normal, y los seres humanos tenemos la capacidad de controlar este miedo.
“Es una respuesta innata, normal, instintiva del ser humano a la supervivencia, dentro de nuestro cerebro tenemos algo que le podemos decir a nuestro cerebro primitivo y este ante amenazas de vida se altera, se activa con adrenalina, con cortisol y manda una señal a todo nuestro cuerpo para que hagamos todo lo posible por tratar de sobrevivir”, explica la sicóloga Guevara.
Ante el miedo, la experta recomienda detenernos a pensar un momento y analizar que mis pensamientos también son los de muchos, y que debo pensar bien mi actuar para no pensar de forma instintiva. La experta dice que se debe buscar tener empatía social “lo que yo estoy pensando, también lo piensan 10 personas más”.
Y agrega: “Hay un temor social, es normal; todas las etapas de la humanidad han tenido que enfrentarse a una situación que les obliga a crear nuevas herramientas. En el pasado pudimos haber visto diferentes situaciones, enfermedades, que se enfrentaron a la humanidad, y la humanidad desarrolló la capacidad para poderle hacer frente, normalizarla y neutralizarla; esto es algo que es humano, es bueno que nosotros busquemos este tipo de experiencias en las que el común de humanidad o las personas mismas individualmente han logrado sobreponerse a esta situación”, sostiene.
El miedo explica por qué las personas hicieron compras que dejaron vacíos los supermercados.
Según la experta, el miedo hace que los seres humanos nos quitemos pequeños pesos y sí, comprar papel higiénico es quitarnos un pequeño peso, también la compra de pampers –en el caso de tener niños pequeños- toallas y todos aquellos productos que pensamos podrían escasear.
El pánico en los seres humanos hace que nuestro cuerpo libere una hormona denominada cortisol, que nos puede llevar a algos niveles de estrés, pero puede ser controlada ¿cómo?
En primera instancia, Guevara recomienda controlarla con una buena alimentación, iniciando con aquellos que nos ayudan a generar una hormona de contraste: la serotonina.
“Los alimentos que consumimos liberan sustancias a nivel de nuestro cerebro que nos pueden calmar, por ejemplo, el banano, los garbanzos, las almendras, las fresas, el kiwi, el arroz, el pan integral, todos estos liberan en nuestro cerebro que es la serotonina, y la serotonina tiene que ver con la sensación de alegría y de paz. Contrarresta el cortisol cuando estamos en un estado alerta”, dice Guevara.
A la par de la alimentación, tener una rutina mientras se permanece encerrado en casa es importante para no caer en la desesperación.
Iniciar el día con un poco de ejercicio es vital, según la experta, y aún más para las familias que gustan por el deporte, practicar zumba o algún tipo de aeróbicos; también se puede dedicar un tiempo a la lectura o ver alguna película en familia.
Lo importante es que cada persona debe sentir que tiene el control de la situación ¿y cómo se logra esto? Cumpliendo con las medidas preventivas ordenadas por las autoridades.
Otro punto para mantener la calma es fijarnos horarios para la búsqueda de noticias: mañana, mediodía y noche para siempre mantenernos informados sobre la emergencia y evitarnos la ansiedad; Guevara explica que es importante equilibrar las noticias que consumimos y buscar una noticia positiva y no solo de la cantidad de muertos por coronavirus.
“Si yo me detengo un tiempito a pensar, voy a ser capaz de entrar en una rutina de cuidado cotidiano, voy a poder alimentarme bien, voy a poder crear lazos con mi familia en el juego, voy a poder normalizar mis emociones”, dice la sicóloga del organismo internacional.