El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, dijo estar alarmado por las
ejecuciones extrajudiciales cometidas en El Salvador por elementos de seguridad.

El funcionario denunció, durante su discurso anual ante la Sesión 37 del Consejo de Derechos Humanos, impunidad en estos crímenes y afirmó que la situación no se resuelve con quitar de los sus puestos a los responsables.

“Estoy alarmado por los informes de ejecuciones extrajudiciales por parte de las fuerzas de seguridad en El Salvador, alimentados por una rendición de cuentas muy débil por estos crímenes. Los movimientos para disolver o reestructurar las unidades de policía que han sido acusados de ejecuciones extrajudiciales no reemplazan la necesidad de responsabilizar a los perpetradores", afirmó.

También se pronunció por los casos de feminicidios en el país y sobre la penalización del aborto. “La situación de las mujeres y las niñas en el país sigue siendo profundamente preocupante, ya que las tasas de homicidio y violencia contra las mujeres figuran entre las más altas de la región y, con frecuencia, se cometen con impunidad", mencionó.

Agregó que cuando visitó el país en noviembre del año pasado, le impresionó conocer las severas leyes que tiene el país con respecto al aborto y que conoció el caso de Teodora Vásquez, quien fue condenada a 30 años de cárcel por aborto y que luego de comprobarse su inocencia, el Estado salvadoreño no le ha reparado por los 10 años que pasó en prisión.

“Una mujer joven, a quien conocí estando detenida en Ilopango, fue liberada recientemente tras la conmutación de su sentencia de 30 años de cárcel. Sin embargo, ella no ha sido declarada inocente, y no ha recibido ninguna reparación por los más de 10 años que ha pasado en la cárcel. El saber de que muchos en el país quieren elevar la pena a 50 años, demuestra cuán crueles podemos ser los humanos y la necesidad indiscutible de los derechos humanos", sostuvo.

El alto comisionado hizo un llamado a las autoridades salvadoreñas a terminar con la aplicación de ley y a revisarlos casos de detenidas por haber abortado.

“El Salvador debe suspender la aplicación de esta legislación mal concebida e inmediatamente revisar todos los casos en que las mujeres han sido detenidas por delitos relacionados con el aborto", exhortó Al Hussein.