Los restos de Ayala fueron encontrados enterrados, casi un año después en San Francisco Javier, Usulután. / DEM


Cuatro imputados que se acogieron a beneficios penales, a cambio de esclarecer el feminicidio de la agente Carla Ayala, declararon este martes 6 de noviembre, en el séptimo día de juicio que el Juzgado Especializado para una Vida Libre de Violencia y Discriminación contra las Mujeres realiza contra 13 imputados, nueve de ellos, agentes y oficiales policiales.

Abogados consultados sobre el juicio afirmaron que ayer declararon cuatro testigos a fines de Juan Josué Castillo Arévalo, alias "Samurái", prófugo de la justicia desde el 29 de diciembre de 2017, día que fue asesinada y desaparecida la agente Ayala.

De acuerdo con la fuente, dos de los testigos colaboraron en la sepultura de los restos de la agente Ayala y le facilitaron los medios a "Samurái" para que escapara.

El proceso judicial en el caso de la agente Carla Ayala tiene reserva tras la judicialización, según la ley especializada, lo que prohíbe que terceros ajenos a las partes procesales permanezcan en la sala de audiencia, de ahí que el mismo se desarrolla a puerta cerrada.

Por ese motivo, los defensores y fiscales consultados sobre el avance del juicio se niegan a brindar por menores la jornada judicial.

Para este miércoles ha sido citado el criminalista de la Fiscalía, Israel Ticas, quien ofrecerá una amplia exposición sobre el estado de los restos humanos de la agente Ayala encontrados en la montaña de San Francisco Javier en Usulután en septiembre de 2018.

El experto indicará a la jueza el procedimiento técnico forense seguido para recuperar cada uno de los restos de la agente policial asesinada.

Los hechos que terminaron con la vida de la agente Ayala ocurrieron la madrugada del 29 de diciembre luego de una fiesta navideña en la sede del extinto Grupo de Reacción Policial (GRP) ubicado en colonia La Cima al Sur de San Salvador.