El Juzgado Especializado para una Vida Libre de Violencia y Discriminación contra la Mujer, de San Salvador, condenó a 35 años de prisión a Rodrigo Alfredo Pérez González tras encontrarlo culpable del feminicidio de su compañera de vida y abandonar su cuerpo en un basurero, calle a Huizúcar, al sur de San Salvador.

Por este mismo caso también era procesada la hermana del imputado, identificada como Brenda Carolina, pero la jueza la absolvió por falta de pruebas en su contra.

Los hechos que se le atribuyeron a Pérez González ocurrieron el 19 de noviembre de 2016, dijo el fiscal del caso.

Según la Fiscalía, el cuerpo de la víctima tenía múltiples golpes en diferentes partes de su cuerpo que le causaron la muerte. La condena fue por el delito de feminicidio simple.

Las investigaciones revelan que los hechos que acabaron con la vida de la víctima solo identificada como Edith Marcela, compañera de vida de Rodrigo Alfredo, sucedieron en la casa de ambos y ese mismo día, su cadáver fue lanzado a la orilla de la carretera.

Tras el asesinato de Edith Marcela, el principal sospechoso desapareció y no fue sino hasta el 21 de diciembre de 2019, tres años después del hecho, que fue capturado cuando ingresaba al país, procedente de Honduras por la frontera terrestre de El Amatillo, en La Unión.

La fiscal del caso manifestó que contó con diez testigos, entre ellos un perito, con el que se fortalecería la hipótesis del Ministerio Público, el cual por tener reserva no fue revelado. La pareja eran padres de un menor que quedó en la orfandad.