Cortesía: Secretaría de Prensa de la Presidencia


La carrera por conseguir la inmunidad de la población mundial contra el covid-19 está dejando atrás a los países más pobres. En El Salvador, como en el resto de la región, más del 80 % de las vacunas han sido suministradas por donaciones y el mecanismo de apoyo Covax, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para países en desarrollo.

Más que para proveer vacunas "gratis", el Fondo de Acceso Global para Vacunas Covid-19 (Covax), busca reducir la desigualdad en el acceso que tienen los países del mundo para conseguir la codiciada vacuna. De no ser por este mecanismo, El Salvador habría conseguido a penas 20,000 dosis de las 105,440 que ya recibió hasta la fecha.

Puesto de una manera simple, de cada 10 vacunas que han llegado a El Salvador, ocho fueron donadas a través de Covax.

Un primer cargamento llegó el 17 de febrero con 20,000 dosis de la vacuna de AstraZeneca/Oxford; mientras que el 11 de marzo arribó un segundo lote, el primero de Covax, con 33,600 aplicaciones de la misma marca. Este lunes 22 de marzo se recibió el segundo paquete de Covax con 51,840 dosis de la vacuna Pfizer/BioNtech.

De las 105,440 vacunas en suelo salvadoreño, 85,440 provienen de Covax: es decir, El Salvador aseguró más del 81 % de sus dosis a través de la asistencia directa de la OMS. Esto, en clara desventaja con países ricos que acaparan las compras directas a farmacéuticas.

Una desigualdad grotesca


Aunque El Salvador hace lo posible por avanzar en su plan de vacunación a pesar de los escasos recursos; otros países compran sin control todas las vacunas que se están produciendo, día con día, en todo el mundo.

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, aseguró este lunes que la diferencia entre el número de vacunas administradas en los países ricos y el número de vacunas administradas a través de Covax "aumenta y se vuelve cada día más grotesca".

"Algunos países se apresuran en vacunar a toda la población cuando otros países no tienen nada. Esto puede dar seguridad a corto plazo, pero es un falso sentimiento de seguridad", agregó.

En todo el planeta, más de 430 millones de dosis ya fueron aplicadas, entre ellas, más de un 25 % solo en Estados Unidos, según el balance de la agencia de noticias AFP.

Otros países como Israel, por ejemplo, ya inmunizaron al 60 % de su población e incluso utilizan la vacuna como moneda de cambio por apoyo diplomático.

El medio local The Times of Israel reportó que el país del medio oriente se está alistando para regalar "decenas de miles de vacunas contra el coronavirus en al menos 15 países en recompensa por su apoyo diplimático".

El número incrementó a 19 un día después, y la lista "aún no ha finalizado, pero incluirá varios países que se han comprometido a trasladar sus embajadas a Jerusalén", según la emisora pública Kan.

En contraste, solo 0.1 % de las dosis administradas en el mundo fueron en países de "renta baja", mientras que los países de "renta alta", que incluyen al 16% de la población mundial, concentran más de la mitad de las dosis inyectadas.

¿Cómo avanza la vacunación en El Salvador?


A pesar de estar suscrita a la iniciativa Covax, Centroamérica está a la zaga del mundo en la inmunización contra el covid-19. Sin embargo, los problemas de producción de las farmacéuticas y el acaparamiento de países ricos ha impedido que se pueda cumplir con las entregas programadas para la región.

El Salvador, sin embargo, está muy por delante de Guatemala, Honduras y Nicaragua, que a penas han recibido sus primeras 5,000 dosis donadas por Israel y Rusia.

Según el ministro de Salud, Francisco Alabi, El Salvador ya inmunizó a los profesionales de Salud que están en contacto directo con pacientes de covid-19, y actualmente avanza al personal que no está tratando casos de coronavirus.

Luego de finalizar con la inmunización del personal de primera línea no médica, que incluye a la Fuerza Armada de El Salvador, la Policía Nacional Civil y maestros; "se avanzará con la fase que incluye a las personas con enfermedades crónico degenerativas, como la enfermedad pulmonar obstructiva, diábetes e hipertensión, seguido por la población de la tercera edad mayor de 50 años".

Según Alabí, con ambas fases se estaría garantizando la cobertura del 90 % de las morbilidades que suceden a causa de la enfermedad.