Jesús recibió una copia de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, donde condenó a El Salvador como responsable de las violaciones a derechos de Manuela. / Gabriela Palacios.
Un día después que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), Jesús, el hijo mayor de Manuela, señaló que la captura y condena de su mamá no fue correcto y agradeció porque la justicia llegó a su familia.
Me siento muy agradecido por lo que la Corte ha hecho, por lo de mi mamá; se ha hecho justicia. El nombre de mi mamá se ha limpiado y me siento muy orgulloso por eso, me siento dichoso de ser hijo de ella’’. Jesús, uno de los hijos de Manuela.
Ayer, la Corte IDH condenó al Estado salvadoreño y lo declaró responsable de la muerte de Manuela, la joven acusada de homicidio agravado de su bebé, tras sufrir una emergencia obstétrica, y que al no recibir atención, enfermó y su enfermedad derivó en su muerte.
"Me hace feliz a mí y mi familia (la sentencia de la Corte IDH), nos hace entender que lo que hicieron con mi mamá no estuvo bien, no investigaron que ella estaba enferma, no investigaron que ella podía dejar a sus hijos huérfanos, que mi abuela sufre de la tensión (arterial), eso no lo vinieron investigar’’, afirmó Jesús hoy en una conferencia de prensa.
En 2010, mientras purgaba una pena de 30 años de cárcel, Manuela murió y dejó dos niños en la orfandad, uno de siete y el otro de nueve años, en condiciones económicamente precarias, ya que la joven era de precarios recursos económicos.
La mañana de este miércoles, la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local, el el Centro de Derechos Reproductivos y la Agrupación ciudadana celebraron la sentencia y agradecieron a quienes han acompañado el camino legal.
¿Qué pasó con Manuela?
Manuela fue una mujer analfabeta nacida en un entorno rural y pobre que en febrero de 2008 sufrió una preclampsia grave postparto por la que fue atendida en un hospital de San Francisco Gotera, departamento de Morazán.
Las autoridades allanaron su vivienda un día después encontrando en una fosa séptica el cuerpo de un recién nacido.
En agosto de 2008, Manuela fue condenada a 30 años de prisión por homicidio agravado y solo dos semanas después la sentencia fue declarada en firme.
En abril de 2010, Manuela murió de cáncer linfático cuando cumplía su condena, la CIDH enfatiza que recibió tratamiento de forma tardía e irregular.
La representante de la Colectiva Feminista, Morena Herrera, agregó que Manuela no era conciente que pasaba por un emabarazo intempestivo "simplemente sintió la necesidad de ir al baño y estando en el baño, varios metros lejos de su casa se desmayó y perdió la gestación, cuando reaccionó ya estaba esposada a la cama de un hospital", señaló.