La Fiscalía General de la República asegura que los ilícitos que cometía esta estructura fueron descubiertos mediante la intervención de sus celulares.
“Los delitos los cometían como parte de una estructura, en un inicio de la investigación se tuvo el aviso de una víctima protegida que proporcionó información que de un número telefónico la estaban extorsionando”, afirmó el fiscal.
Con la herramienta de escuchas telefónicas se pudo corroborar los delitos de proposición y conspiración para el cometimiento del delito de homicidio, extorsión y tráfico de drogas.
La investigación arrojó que las extorsiones se hacían desde Panchimalco, además se supo cómo estaban estructurados y operaban, según el fiscal.
“Se les acumulan cinco casos de extorsión, entre extorsión agravada consumada contra un testigo protegido y proposiciones y conspiraciones para el cometimiento del delito de extorsión, esto se tuvo a través de las escuchas telefónicas al igual que para el delito de homicidio”, detalló el fiscal.
Las extorsiones eran variadas de acuerdo con el tipo de víctima, en algunos casos eran empresarios y comerciantes formales e informales, mientras otros eran personas civiles.
Como prueba, la Fiscalía tiene testigos, víctimas y audios de llamadas telefónicas intervenidas.