Fotografía: FGR


El Ministerio Público giró órdenes de captura para cuatro policías y 15 militares, de los que 10 ya fueron capturados, del resto se desconoce su paradero.

Las 36 personas fueron asesinadas en 20 casos de homicidios, la mayoría en la zona oriental del país, dos homicios tentados o imperfectos, una conspiración de homicidio, una privación de libertad y 13 casos de robos a bancos, cooperativas y agencias de remesas, entre ellas un banco de Usulután, el año pasado.

Entre los 36 homicidios, dos corresponden a sicariato. Según la Fiscalía, tienen documentado el pago de $600 que hizo una persona, desde Estados Unidos al grupo de policias y militares para que asesinara a pandilleros.

 

 

Al inicio, la fiscalía dice que eran dos estructuras que terminaron conformando una para asesinar pandilleros. "El caso no es del agrado de la población, ni de los sectores pero el ordenamiento jurídico lo establece", dijo uno de los fiscales.