Enero y febrero del 2018 han acumulado más de 70 feminicidios según las estadísticas de la Policía Nacional Civil.
De acuerdo con los datos del Instituto de Medicina Legal (IML), solo en enero reconocieron 22 cadáveres de mujeres; cinco de esos fueron en el departamento de San Salvador, en los municipios de Ilopango, Apopa y San Salvador.
El IML dice que de los 22 cádaveres reconocidos, 14 fueron asfixiadas. Otros feminicidios han sido ocasionados con objetos contundentes, como fue el caso de la médico Rosa María Bonilla, de 45 años de edad, quien fue asesinada por su compañero de vida, Denis Edenilson Suárez, de 35 años, el pasado 24 de enero en su casa de habitación en Santa Ana.
Fuentes extraoficiales dijeron, en su momento a este medio, que Vega de Bonilla tenía el cráneo fracturado y golpes a partir del cuello. El comunicado que difundió la PNC, señala que los múltiples golpes iniciaron la inspección en la casa de la ahora fallecida. En este caso, la Fiscalía dijo que la víctima intentó defenderse, porque el victimario tenía aruñones en sus brazos, axilas y cuello. Un juez de paz envió a Suárez a prisión provisional.
El 14 de febrero, en un parque de los condominios Jardines de la Zacamil, cerca de los edificios “Los 400” de ese centro urbano, en jurisdicción de Mejicanos, fue encontrado el cadáver de Graciela Eugenia Ramírez, de 22 años.
Según las versiones policiales, residía con su prometido en uno de los apartamentos cercanos a donde fue localizado su cadáver y se casarían en abril próximo.
Uno de los casos más recientes fue el asesinato de María Aldana, de 60 años, el pasado 20 de febrero, en el cantón Maquilishuat, de Ilobasco. El homicidida fue su propio hijo Walter Eduardo Castillo, capturado en flagrancia ese mismo día. En este caso, las autoridades no revelaron el motivo del feminicidio.
El fiscal general de la República, Douglas Meléndez, ha pedido un alto a las agresiones, ataques y asesinatos hacia las mujeres del país.