El delito de desaparición es sancionado con una pena de tres a seis años en modalidad simple y que puede ser gravada con la tercera parte de la condena.


El juzgado Primero de Paz de Santa Tecla encontró suficientes evidencias para que 22 de los 24 imputados implicados en la desaparición de tres albañiles en calle al Boquerón, el 24 de mayo de 2019, permanezcan en detención provisional mientras enfrentan la fase de instrucción.

En dos de los acusados, los defensores demostraron que eran menores de edad cuando se dieron esos hechos, por lo que fueron separados del proceso de adultos y puestos a la orden de un juzgado de menores por el delito de desaparición de personas.

La Fiscalía General de la República afirmó que cuenta con dos testigos, un imputado con beneficios penales identificado con clave “Suiza” y uno protegido con clave “Benedicto”.

Ambos testigos coinciden en los hechos que dieron lugar a la desaparición de los tres trabajadores que en mayo de 2019 construían una piscina en una residencia, situada en calle al Boquerón y que fueron raptados en momentos que botaban ripio de un camión en cantón Álvarez.

“En un primer momento se llevan a dos que descargaban de ripio el cambio y posteriormente, al conductor, a un lugar conocido como La Comenera donde son agredidos y luego a otro lugar donde todavía siguen desaparecidos”, afirmó el fiscal del caso.
El testigo Suiza no menciona la participación delictiva de cada uno de los imputados en cuanto a la privación de libertad y el posterior homicidio". Raymundo García, defensor

El testigo.


Clave Suiza revela que el cabecilla apodado “Zaiper” dirigía la operación criminal y que a él le encomendó la función de vigilancia o posteo para alertar a la pandilla de cualquier movimiento de la Policía o el Ejército en la zona.

Refiere que los trabajadores fueron interceptados por pandilleros de la clica Cascajera Locos Salvatruchos que opera en la comunidad Las Margarita y que fueron llevados al cantón Álvarez donde fueron interrogados por orden del Zaiper sobre su procedencia, la pandilla a la que pertenecían y les tomaban fotos.

Afirmó que el Zaiper se comunicaba con sus compinches en el lugar de los hechos, vía Telegram, porque harían una “pegada” que equivale a asesinatos. Clave Suiza asegura que escuchó que uno de los pandilleros decía “yo voy a matar a éste y comienza a golpearlo” para referirse a uno de los trabajadores. El imputado con beneficios penales afirma que estuvo diez minutos en el lugar donde tenían a las víctimas y que comenzaron a torturar, dice que veía que sangraban.

Después afirma haber visto que uno de los sujetos llevaba un azadón, otro, una piocha y un tercero un fusil AK-47 recortado con dos cargadores. Todo eso comenzó cerca de las 10 de la mañana del 24 de mayo y siguió toda la noche.

Vio que las víctimas estaban atadas de sus manos hacia atrás, al igual que sus pies.

A las 2:00 de la madrugada del 25 de mayo, asegura que vio que subieron dos camionetas, una de color gris en la que regresaron los 24 sujetos hacia la comunidad Las Margaritas después de desaparecer a los tres trabajadores.