Ayer, los vendedores cerraron la carretera Panamericana, en Santa Tecla, y pidieron se investiguen los disturbios que dejaron una persona muerta. / Wilson Urbina


Después del enfrentamiento ocurrido el pasado 8 de noviembre entre miembros del Cuerpo de Agentes Metropolitanos de Santa Tecla (CAMST) y vendedores informales de dicha localidad, el inspector Walter Guillén, jefe de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO), informó que las investigaciones determinarán el uso excesivo de la fuerza de de las dos partes involucradas en los disturbios.

Guillén, al ser cuestionado por la prensa sobre si agentes del CAMST se excedieron en sus funciones como garantes del orden, aseguró que la Policía Nacional Civil “mantiene una investigación para determinar si en esa situación hubo algún uso excesivo de la fuerza; sin embargo, tienen reflejados en sus estadísticas personas que han sido lesionadas con arma de fuego, pero quisiera ser enfático en manifestar en que esperemos los resultados y darles una versión más precisa de aquellas acciones que se dieron entre los dos (vendedores y agentes)”.

El inspector detalló que las armas de fuego incautadas a los agentes del CAMST eran M30, pero no respondió sobre el tipo de balas que portaban dichas armas y reiteró que “las investigaciones continúan y para ser responsable de la información vertida a la ciudadanía”.

Asimismo, Guillén aseveró que debido a la falta de capturas durante el enfrentamiento no se tiene un perfil de posibles pandilleros implicados en el enfrentamiento, porque “fue una situación colectiva” pero que analizan los hechos y ver si tienen relación con algún grupo delictivo.

El inspector Guillén también dijo que los disturbios fueron “atípicos”, a los que históricamente suceden en el país por la cantidad de afectados.



Balas

Eduardo Espinoza, viceministro de Políticas de Salud, aseguró que el hospital Nacional San Rafael recibió cerca de 25 personas lesionadas por arma de fuego: “Las radiografías de los proyectiles que están alojados en los cuerpos de los heridos son metálicas, no de goma”, dijo.

Espinoza afirmó que vio uno de los proyectiles y parecía de carabina, pero que no podía dar fe de que tipo de armas porque no conoce de las mismas. Agregó que hasta por la mañana había dos pacientes en estado crítico.