El Juzgado Décimo Segundo de Paz de San Salvador resolvió no ordenar captura para el expresidente de la República Mauricio Funes y para el guatemalteco Jaime Ramón Aparicio Mejía, el primero acusado de casos especiales de lavado de dinero y el segundo por cohecho (soborno), luego de dar y aceptar una avioneta, a cambio de un contrato de construcción de un puente entre La Libertad y Chalatenango.
¿La razón? según fuentes judiciales, el Juzgado notificó a través de la Corte Suprema de Justicia de El Salvador a las cortes de Nicaragua y Guatemala para que, a su vez, avisaran a los imputados de la audiencia inicial que se realizaría este miércoles 6 de enero, las autoridades salvadoreñas no recibieron respuesta de sus homólogas, y eso favoreció a los imputados.
El juzgador no resolvió de la misma manera contra Miguel Menéndez, conocido como "Mecafé", otro de los procesados por este mismo caso, a quien en diciembre le decretó que siga procesado en detención.
Funes está asilado desde 2016 en Nicaragua, y posteriormente se convirtió en ciudadano nicaragüense, esto le ha valido para no responder por otros seis procesos judiciales abiertos en El Salvador, entre ellos, el desvío de más de $351 millones de las arcas del Estado para cuentas personas suyas y de sus familiares más cercanos durante su gestión entre 2009 y 2014.
Por su parte, el guatemalteco Aparicio Mejía descuenta una condena en uno de los penales guatemalteco por otro caso de corrupción en construcciones de su país.
¿Cuál es el caso?
Según la Fiscalía, el guatemalteco Aparicio Mejía quería participar de la licitación pero además garantizarse que ganaría el contrato. De ahí, la forma de obtenerlo fue entregar como dádiva un avión al expresidente Funes Cartagena y el expresidente del Centro Internacional de Ferias y Convenciones, Miguel Meléndez Avelar.
La entrega del avión fue en enero de 2013, y el proceso de licitación privada para adjudicar la construcción del puente inició en marzo de ese mismo año; más adelante al revisar la oferta de la sociedad Servicios Calificados de la Construcción, S.A. (SERDELCO S.A.), cuyo representante legal era Aparicio Mejía, la comisión que valúa la oferta determinó que esta no cumplía con las condiciones técnicas ni con la capacidad material para el desarrollo de la obra y recomienda dar por desierta esa licitación.
“Ahí comienzan unos pasos que dan a conocer el favorecimiento que se hace para con la sociedad a fin de que se les adjudicara la obra, puesto que ya habían recibido como dádiva el avión, finalmente se les adjudicó la obra por un costo de $8.4 millones”, afirmó el fiscal el día de la acusación.
La empresa no tenía la capacidad porque no pudo ni siquiera presentar el diseño del puente lo que hizo que la Comisión Técnica de Obras Públicas, declarara la caducidad del proceso de licitación y se diera por terminado.
En tanto, el avión ya había sido entregado para conseguir ese contrato, mientras Carlos Mauricio Funes y José Miguel Meléndez ya habían hecho uso y disposición, de ese avión.
“Hay registros que denotan 47 vuelos para el señor José Miguel Menéndez en esa avioneta y 16 vuelos para Mauricio Funes Cartagena, incluso en el caso del expresidente hay vuelos posteriores de su mandato presidencial”, afirmó el fiscal.
En los 47 vuelos, Menéndez Avelar viajó a siete destinos: El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Honduras, Panamá, Costa Rica y Los Estados Unidos, durante el periodo del 27 de junio de 2013 al 13 de septiembre de 2016.