El Salvador recibió durante los primeros ocho meses del 2017 a más de 1.700 niños y adolescentes retornados principalmente de México y Estados Unidos, informó hoy la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
De acuerdo con el organismo, que cita cifras oficiales, entre enero y agosto pasados fueron deportados 1.787 menores de 18 años, 98 de Estados Unidos, 1.680 de México y de resto de países no precisados.
Esas cifras reflejan un incremento del 44,1 % de los retornos desde Estados Unidos y una baja del 66,1 % de los deportados desde México. La fuente detalló que el 43,4 % de estos niños y adolescentes viajaron por "factores económicos", el 28,3 % por "reunificación familiar", el 26,2 % por la inseguridad que vive el país centroamericano y el resto por otras razones no especificadas.
El oficial de información de la OIM para el Triángulo Norte de Centroamérica, David Morales, dijo a mediados de julio que entre las causas que han propiciado la caída de los retornos está la disminución del número de centroamericanos tratando de llegar a Estados Unidos.
Añadió que el discurso antinmigrante del presidente de EE.UU., Donald Trump, ha llevado a las familias de esta zona de Centroamérica con deseos o necesidad de ingresar al país norteamericano a "esperar" o "posponer" su partida.
De acuerdo a diversas fuente consultadas por Acan-Efe, los traficantes o "coyotes" en El Salvador forman redes con otros en Guatemala y trabajan bajo la venia de los cárteles de droga en territorio mexicano.
Los 2,8 millones de salvadoreños que viven en Estados Unidos enviaron a El Salvador en 2016 un total de 4.576 millones de dólares en remesas, la cifra más alta en la historia del país centroamericano y que representa el 17,1 % de su producto interno bruto (PIB).