Un las últimas 48 horas, la Fiscalía General de la Repúblicay la Policía Nacional Civil registran la muerte violenta de al menos 43 personas, en todo el país.
Ayer, un soldado identificado como José Alfredo Ascencio de la Cruz, de 30 años de edad, fue asesinado con arma blanca y de fuego, en una vereda del caserío Los Arenales, cantón El Sincuyo de Tacuba, Ahuachapán.
Según el reporte policial, el cuerpo del militar, destacado en la Fuerza Naval de Puerto El Triunfo, Usulután, fue encontrado por una denuncia al 911 de la PNC.
Más tarde, el hermano de un agente de la Policía fue asesinado en la colonia Boillat, en Ciudad Barrios, San Miguel.
Ayer, hasta las 7:00 de la noche, este medio contabilizó 43 homicidios, en todo el país, entre ellos el de dos menores en el Centro Penal de Tonacatepeque. Los menores fueron identificados como Juan Edenilson V. y como Arnulfo de Jesús C.
Sobre este hecho, ni autoridades policiales, fiscales y penitenciarias quisieron explicar las circunstancias en el que ocurrió.
Otros dos dobles homicidios ocurrieron ayer, uno fue identificado en el cantón San Francisco, Guajoyo, Metapán, Santa Ana y otro, en la noche, en Los Naranjos, Sonsonate.
De este último hecho, las víctimas fueron identificados como Edwin Alexis Alas, de 22 años y Julio Alberto Ponce Martinez de 21 años, quienes fueron asesinados en la cooperativa San Rafael, del Cantón los Naranjos.
“Hemos tenido en las últimas 48 horas, un incremento de intercambio de disparos, hemos tenido un policía lesionado en San Salvador, en el procedimiento a calle a Huizúcar y tuvimos un compañero, también de la delegación de Cabañas en otro procedimiento en Guacotecti, en ambos casos están estables, esperamos que se recuperen. Ambos casos sucedieron en circunstancias cuando equipos policiales desarrollaban su trabajo en sus zonas efectivas”, dijo ayer el ministro, Mauricio Ramírez, en referencia a la lesión que recibió un policía el pasado jueves, en la noche.
Ramírez también dijo que hasta la fecha 28 policías han muerto en manos de pandillas, 13 militares y dos custodios de la Dirección General de Centros Penales.
El funcionario destacó que las cifras de agentes del Estado asesinados son menores en comparación con el 2016, “aún así indica que los miembros de la institución siguen bajo esta amenaza”, señaló.
Esta semana, el gobierno desplegó a policías y militares en San Salvador, para “reforzar”, la seguridad en, al menos, 60 “puntos críticos”, identificados por la Policía en la capital. Ayer hicieron un operativo vehicular.