El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales anunció que el próximo jueves 22 de julio ingresará una nueva cantidad de polvo del Sahara al país.
De momento, el reporte de la calidad de aire indica que este martes se disipará la cantidad de arena del Sahara, pero el martes ingresará otra que no sobrepasará los 35 microgramos por metro cúbico.
Una nube con arena del Sahara llegó el pasado 8 de julio y se ha mantenido de forma leve en el país, provocando ambiente cálido y atenuando lluvias.
Sin embargo, esa nube de polvo trajo consigo los 57 microgramos de arena por metro cúbico.
La arena del Sahara se levanta cuando el aire cálido del desierto choca con el aire más fresco de la región de Sahel –al sur del Sahara-. Mientras que las partículas ascendentes se remolinan, los vientos alisios intensos comienzan a soplar hacia el oeste en el Atlántico Norte llevando las partículas hasta el continente americano.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, cuando estos polvos logran alcanzar áreas “pueden provocar la aparición de alergias y crisis asmáticas en muchas personas, sobre todo aquellas que ya sufrían problemas respiratorios o de inmunodepresión.
Este fenómeno genera riesgo de bacterias, virus, esporas, hierro, mercurio, y pesticidas conducidas por el polvo, lo que podría derivar en la aparición de alergias y crisis asmáticas en algunas personas, sobre todo aquellas que sufren problemas respiratorios o de inmunodepresión, como casos de gripes persistentes o alergias sin causa aparente, que pueden haber sido provocadas por el contacto con partículas de origen biológico presentes en estas brumas.