Un grupo de 90 soldados de diferentes guarniciones del oriente del país, y sus instructores del comando de ingenieros de la Fuerza Armada, trabajan en la construcción de 300 casas para afectados por el enjambre sísmico en Chirilagua.
En ese municipio numerosas viviendas colapsaron o sufrieron daños, por lo que el gobierno central anunció la inversión de $1 millón en este proyecto.
Las casas son desmontables y antisísmicas, miden cinco por seis metros y constan de dos cuartos, sala, dos puertas y dos ventanas. Además de la Fuerza Armada, intervienen en su ejecución las comunidades beneficiadas y la alcaldía de Chirilagua.
Antonio Vásquez, alcalde de la localidad, explicó que aún hay personas durmiendo en las calles pero confía que en diciembre se haya finalizado la construcción de casas en los cantones Puerto Viejo, Los Pajaritos y La Estrechura.
Cindy Amaya es una de las personas beneficiadas. Dio las gracias a Dios y a todos los que están trabajando para que ellos tenga una casa digna donde poder vivir y resguardarse de las inclemencias del tiempo.