“Sé que algunas escuelas ya hasta lo implementaron, pero en los colegios nada, no tenemos un avance, solo sabemos que estamos obligados a cumplir el reglamento”, dijo Machado.
Agregó que este plan trae dificultades que no han sido contempladas por las autoridades de salud y educación, como el tiempo y la falta de orientación. Como asociación creen que se puede controlar la alimentación dentro de los centros educativos; sin embargo, afuera es posible adquirir los alimentos que quieren retirar.
La normativa regula la venta de alimentos con altos contenidos de azúcares, sal y calorías y debe ser aplicada desde el 2018 en centros escolares públicos y privados. Según autoridades del Mined, algunas escuelas ya han implementado las medidas que exige este plan.
“El tema de obesidad no es culpa de los cafetines escolares”, dijo Machado. Agregó que no están en contra, pero existe falta de promoción y motivación por parte del Ministerio de Educación.