El agente policial fue enterrado ayer en el cementerio de Suchitoto, Cuscatlán. / DEM


El homicidio contra el agente de la Policía Nacional Civil (PNC), José Domingo Hernández, habría tenido como móvil el robo de su arma de fuego y de su teléfono celular, según el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Rogelio Rivas.

“La primera hipótesis que tenemos es que ha sido el robo por las característica que ha sido cometido el homicidio”, expresó el funcionario.

Confirmó que los delincuentes que lo atacaron le robaron sus teléfonos celulares y su arma cuando iba en su motocicleta, acompañado por otra persona.

Agregó que cuando iba en tránsito se le atravesó un vehículo desde donde le dispararon, luego los hechores procedieronn a robarle las pertenencias.

Reiteró que manejan varias hipótesis y que no descartan cualquier otra intención que estaría detrás del asesinato.

El agente Hernández fue acribillado a tiros la noche del pasado lunes, en el cantón Los Zacatillos, en el municipio de San Juan Nonualco, La Paz.

Aún con vida, fue trasladado a un hospital nacional de Zacatecoluca donde murió a causa de las lesiones de arma de fuego.

Durante el operativo de búsqueda de los hechores, supuestos integrantes de la mara MS13, fueron detenidas tres personas sospechosas, pero luego fueron liberadas tras confirmar que esperaban el bus y que no tenían ninguna relación con el crimen.

Hernández fue sepultado ayer tarde en el cementerio general de Suchitoto, en Cuscatlán. Familiares y policías amigos acompañaron el funeral.

Hernández es el primer policía que muere de forma violenta en el año, en el 2019 sumaron 29.