Montano es sobreviviente de un cáncer de vejiga y tiene una lesión en la espalda y, a sus 78 años de edad, fue extraditado de Estados Unidos hacia España para ser juzgado por el delito de asesinatos terroristas en contra de seis sacerdotes jesuitas, en la Universidad Centroamericana, en 1989.
El abogado señaló que han apelado para que Montano no sea procesado por el delito de lesa humanidad, debido a que su extradición fue por asesinatos y terrorismo, y no por el delito anterior, dijo ayer.