El empresario es amigo del expresidente Funes y fue uno de los fundadores del movimiento “Amigos de Mauricio”,que impulsó su candidatura a la presidencia; además estuvo al frente del Centro de Ferias y Convenciones (Cifco). Incluso circuló un vídeo donde, supuestamente, se observaba entregando dinero al exfiscal general Luis Martínez, este último recluido en el penal de Mariona.
Hasta ayer, la Fiscalía General de la República y la Policía Nacional Civil no proporcionaron información detallada sobre las capturas, sus identidades, los delitos que les atribuyen y por qué casos.
En torno al exmandatario, la Fiscalía tinene investigaciones por los casos de contratos de publicidad a Polistepeque, la Presa El Chaparral, los contratos por seguridad asignados a Mecafé y hasta se ha mencionado un spa al que, supuestamente, están vinculadas Ada Mitchell Guzmán Sigüenza, supuesta actual pareja del exmandatario, y la madre de ella, Ada Luz Sigüenza Rodríguez de Guzmán.
El Ministerio Público, a través de un breve comunicado, confirmó que la Unidad de Investigación Financiera (UIF) y la Unidad Anticorrupción han estado en una minuciosa investigación que llevó a girar órdenes administrativas, la especialidad de estas unidades es indagar sobre lavado de dinero, peculado y otros ilícitos relativos a la administración pública.
Funes reacciona
Tras conocer de la captura de su amigo “Mecafé”, el expresidentes Funes, en una entrevista proporcionada a Canal 21 calificó de “arbitraria” la detención.
“Yo no voy a negar que es mi amigo, sigue siendo mi amigo y desde cuando inicié mi candidatura, porque él fue uno de los fundadores del movimiento Amigos de Mauricio, pero eso a que yo le haya favorecido o que CAPRES le haya favorecido durante mi administración con contratos que fueron ganados lícitamente, hay un gran trecho, él como empresario de una de las empresas más antiguas, más prestigiosas” sostuvo Funes.
El exmandatario, asilado en Nicaragua, manifestó que no le extraña el hecho que la Fiscalía esté presentando la acusación, ya que, a su juicio, lo hace en el contexto del cuarto aniversario del gobierno del presidente Salvador Sánchez y que la intención es golpear la actual administración, y de paso, la primera presidencia del FMLN.
Allanamientos claves
El 17 de agosto del 2016, la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía confirmó que había abierto un expediente de investigación contra el expresidente Funes y “Mecafé”.
El punto de partida fue el allanamiento de siete inmuebles propiedad del empresario, pero al término de cinco días registraron 13, entre ellos la casa donde estuvo residiendo Funes y su supuesta compañera de vida, Ada Mitchell Guzmán Sigüenza, quienes días antes habían salido para Nicaragua.
El Ministerio Púbico hizo las diligencias porque uno de sus equipos de inteligencia recibió dos alertas de extraños movimientos que Funes y Menéndez estaban realizando.
Para esa fecha el exmandatario ya estaba tramitando un asilo político en Nicaragua, y argumentó que era objeto de persecución política; al final, el gobierno de Daniel Ortega le otorgó el asilo.
En los allanamientos que duraron cinco días, la Fiscalía encontró información útil para incorporar al expediente que a más tardar el próximo viernes será judicializado ya que las primeras detenciones se comenzaron a ejecutar el pasado martes.
El 23 de agosto de ese año, el fiscal general Douglas Meléndez, confirmó que Funes estaba siendo indagado por un posible lavado de dinero.
El fiscal sostuvo que los registros realizados con una orden judicial habían evidenciado indicios de la existencia de blanqueo de capitales y que como delito generador estaba el peculado (apropiarse de bienes del Estado), enriquecimiento ilícito, malversación, negociaciones ilícitas y tráfico de influencias.
En los allanamientos, la Fiscalía halló un contrato donde consta que el empresario recibió de Mauricio Funes un préstamo por $700 mil.
