Dos integrantes de una estructura que tenía el control del departamento de Cabañas, fueron capturados y presentados al Juzgado Especializado de Instrucción “B”, de San Salvador, para que defina en qué condición serán procesados: en libertad o en prisión.
Los imputados son José Jaime Oliva Fernández y José Benedicto Callejas Alfaro, a quienes la Fiscalía acusa de los delitos de agrupaciones ilícitas, proposición y conspiración para cometer homicidio, tráfico ilícito, así como por privación de libertad y desapariciones de personas, entre otros.
Los imputados son parte de una estructura de la Mara Salvatrucha para quienes la Fiscalía, a fines de noviembre, giró 91 órdenes de capturas, pero solo se hicieron efectivas 50 y 48 no fue posible su detención.
Esta pandilla opera en los municipios de Victoria, Sensuntepeque, Guacotecti y San Isidro, son imputados que se nos quedaron ausentes en el operativo anterior y este día se va a resolver en cuanto a la medida cautelar en la que quedarán sujetos al proceso”. Fiscal del caso.
La audiencia para la mayoría de detenidos (50 imputados) fue el 5 de diciembre y a la fecha, de los 91 imputados, ya fueron arrestados 54 y sometidos al proceso de instrucción o investigación de sus casos.
La supuesta red pandilleril se dedicaba a amenazar a los habitantes de Cabañas para que ayudaran a vender droga o comprar armas. La Fiscalía también los acusa de enfrentamientos o agresiones ilegítimas contra la Policía Nacional Civil, casos de homicidios y cuatro casos de desaparición de personas.
“Estos sujetos prácticamente tenían el control de la zona en Cabañas”, dijo la fiscal del caso.
La fiscal del caso dijo que esta estructura tiene una peculiaridad de acción, ellos no se dedican a extorsionar “porque ellos dicen que con las extorsiones se calienta la zona” y eso quiere decir que la Policía Nacional Civil y la Fuerza Armada ingresan al territorio y obstaculiza sus ilícitos.
“Ellos montan sus negocios y de ahí financía a la pandilla; los habitantes del departamento se abocan a ellos para solventar problemas que se presentan. La gente afectada no va a la Policía sino adonde ellos, porque son ellos quienes dominan el área de incidencia”, dijo la fiscal.
Por esa razón, en Cabañas no eran frecuentes los operativos policiales ni capturas pues la pandilla controlaba la zona.