El juicio contra José Adán Salazar Umaña, Juan Umaña Samayoa y tres familiares de ambos continuó ayer en el Tribunal Segundo de Sentencia de San Salvador con la exposición de la pericia financiera contable, en la que uno de los especialistas afirmó que hay una brecha de $8 millones sin justifican entre los ingresos en bancos, que los declarados al Ministerio de Hacienda, en razón de la renta e Impuesto al Valor Agregado (IVA) por la actividad hotelera entre 2003 y 2017.
Hotesa está conformada por los hoteles Tolteka, San José, Capital, Bahía Dorada, Pacífico Sunrise, hotel Sevilla en Usulután y hotel Las Palmeras en Sonsonate.
“Existe una cantidad considerable y de relevancia de ingresos que supera por mucho lo que está en bancos que se declaró como ingreso. Es decir que hay ingresos de fondos desconocidos que no se puede decir que vienen de la actividad económica que realizaba la sociedad Hotesa o los siete hoteles”, afirmó el fiscal.
El perito afirmó que el cálculo de los ingresos se debía realizar con base en libros contables, informes de declaración de IVA y las declaraciones de la renta anual de José Adán Salazar Umaña, conocido como “Chepe Diablo”, así como a la facturación (tiket, comprobante de caja, crédito fiscal, entre otros) que se emitía de forma diaria, semanal y mensual sobre la ocupación habitacional en los siete hoteles.
El fiscal afirmó que mucha de la información necesaria para establecer la pericia no fue encontrada y como alternativa se buscaron mecanismos como los informes del Ministerio de Turismo, que detalla la tasa de ocupación hotelera general del sector y por cada uno de los hoteles que hay en el país, además los libros de reporte de hora de ingreso y hora de salidas de cada turista, la ocupación de habitaciones por tiempo de estancia y cantidad de personas en cada hotel.
Toda esa información, que según Fiscalía representa el 90 % de la actividad económica de Hotesa, reveló el comportamiento de ocupación de los siete hoteles de Salazar Umaña.
“Podemos tener certeza que la ocupación de Hotesa ni siquiera llegó a la mitad del promedio de ocupación del sector nacional. Quiere decir que no puede tener un ingreso mayor que el del sector”, detalló el fiscal.
El estudio reflejaba que en los hoteles del procesado, alquilaba mucho menos habitaciones que el promedio del sector en el país, sin embargo establecía que su crecimiento anual era del 11 % mientras que el promedio del sector era del 2%.
Pese a tener menos ocupación, Hotesa quintuplicaban a todo el sector, eso no tiene explicación económica y eso indica que el excedente en bancos no proviene de la actividad económica justificada por la sociedad, según el perito.
Los reportes reflejan una baja ocupación en el mejor de los casos, asegura el fiscal, alcanzaron un 33% de alquiler de sus habitaciones en uno de los siete hoteles. “Mientras el sector hotelero nacional andaba en un 70 % de ocupación, Hotesa andaba por un 20 o un 27 %, pero el crecimiento económico era superior de un 11 % cuando el sector apenas alcanzaba un 2 %”, añadió.
Defensa
El abogado, Gerardo Cisneros, defensor de Salazar Umaña, alias “Chepe Diablo”, afirmó que los ingresos de Hotesa son totalmente justificables. “Estamos frente a una pericia que ellos (Fiscalía) no han tenido por muchos años, porque estaba secuestrada por la misma Fiscalía en otro proceso, ellos mismos no han podido coordinarse para compartirse la información contable”.
“Pareciera que Fiscalía nos esté queriendo atribuir la falta de información que tienen a nosotros y transformar esa falta de información en incremento patrimonial no justificado a Hotesa. Hotesa hacía préstamos a sus socios y eso es legal según el Código de Comercio. Capitalizar deudas y acciones es legal, porque ellos no se repartían las utilidades y por eso crecían en las ganancias de Hotesa”, afirmó Cisneros.
Cuestionó la base de los peritos para establecer los ingresos hoteleros a través de los informes del Ministerio de Turismo. Dicen que esos informes no han segmentado la capacidad por región del país, porque no es lo mismo hablar de hoteles de playa en temporada alta, que los que están ubicados en San Salvador y que no tienen ocupación.
Dijo que las estadísticas que da Turismo no está desagregadas y que guardan relación directa con su ocupación, pues no son lo mismo hoteles con cinco estrellas que otros con calificación más baja y que también son determinantes en los niveles de ocupación.