Mientras que la autopsia hecha por el médico Gregorio Menjívar dijo que encontró un hematoma bajo el cuero cabelludo a nivel de “la región perietal izquierda”, producto del trauma al caer en la letrina.
También presenció meconio en los bronquios y al examinar los pulmones encontró que estos respiraron, por tanto concluyó que el niño nació vivo, respiró y lloró.
La autopsia descartó lesiones por violencia en el cuerpo del niño.
El estudio histopatológico fue hecho a partir de una serie de muestras de tejidos, según dijo la forense en el juicio hecho en contra de Evelyn por el delito de homicidio agravado en comisión por omisión, imputado por fiscalía.