Siete miembros que formaban parte de una red que se dedicaba supuestamente a transportar marihuana desde Guatemala, liderada por José Antonio Andrés Jacinto, alias el “Capo” enfrentarían ayer el juicio por el delito de tráfico ilícito de droga en el Tribunal Quinto de Sentencia, pero se suspendió porque uno de los procesados tenía covid-19 y otro no fue trasladado de las bartolinas.

El juicio fue reprogramado para el 4 de octubre.
Todos eran liderados por José Antonio Andrés Jacinto, la droga era introducida en vehículos para no ser detectada por las autoridades y posteriormente distribuida en zonas como Soyapango, Panchimalco y San Salvador”, afirmó el fiscal.

“Utilizaban las fronteras, pick up con caletas, llantas de repuestos y de esa forma introducían la droga para su posterior distribución en el interior del país”, detalló.

La investigación que dio con los imputados inició en septiembre de 2016 y terminó el 29 de julio de 2017, con un testigo que estaba involucrado dentro la banda; él relató los ingresos periódicos de droga y los mecanismos utilizados, “con dicho testigo tenemos prueba directa que incrimina la venta y compra de este tipo de sustancias”, sostuvo el fiscal.

Para demostrar los ilícitos, Fiscalía aseguró que tiene intervenciones telefónicas, seguimiento y vigilancia de equipos policiales, los movimientos migratorios de los integrantes, que dan fe de lo que el testigo ha narrado.

“El testigo refiere cada uno de los ingresos están documentados, identifica los vehículos utilizados, seguimiento que se daba a las personas, hay documentación en la que ellos vendían a otras personas, hay incautaciones de droga corroborada con prueba científica”, aseguró el fiscal.