En el cementerio municipal de San Salvador, La Bermeja, se han sepultado a 58 personas en el área para víctimas por el COVID-19, según el alcalde capitalino, Ernesto Muyshondt.
Sin embargo, señaló que no todos son COVID-19 positivos, sino fallecidos por neumonías a quienes no se les hizo la prueba de la pandemia y deben ser tratados como tal, al momento de ser sepultados.
A principios de marzo, cuando aún no se habían registrado casos sospechosos de coronavirus, la alcaldía de San Salvador reveló que había excavado 118 fosas para sepultar a las víctimas por la pandemia, de esas al momento "la mitad se han ocupado ya", dijo el alcalde Muyshondt, esta mañana en la entrevista de canal 21.
"Hay que aclarar que no son casos oficiales de COVID; hay mucha gente que fallece de una neumonía o enfermedad respiratoria y se debe presumir como que se trata de COVID-19, porque no ha sido ‘testeada’ (sic) y deben de seguirse todos los protocolos sanitarios establecidos por la OMS y Medicina Legal para hacer las inhumaciones de esa manera", manifestó el alcalde Ernesto Muyshondt.
El jefe edilicio adelantó que de las 58 víctimas, la mitad son de la capital y el resto de diferentes partes del país, en donde las municipalidades no tienen la capacidad para enterrar víctimas positivas o sospechosos de COVID-19.
"Sabíamos que no había capacidad tanto de espacio como de tener las condiciones para poder sepultar de la manera indicada, con los trajes especiales, con las medidas sanitarias estrictas en la inmensa mayoría de municipios del país, por eso estamos apoyando", agregó.
La semana pasada, en una conferencia con alcaldes de Arena, el alcalde de Soyapango Juan Pablo Álvarez, dijo que el día anterior había enterrado a cinco víctimas de la pandemia. Hasta el momento, el país registra oficialmente 33 personas muertas por coronavirus..