Los detenidos fueron presentados a la prensa, ayer. / DEM


Una red delincuencial que habría sustraído más de $21 mil de cajeros automáticos, mediante información que sustraían de teléfonos celulares, fue desarticulada por la Policía Nacional Civil.

Según las investigaciones, las víctimas llevaban sus teléfonos a reparar, a un local que está a cargo de Kevin Alexis Hernández Amaya, de 24 años de edad y Adán Cristopher Ardón García, de 27 años, en San Salvador.

Los sujetos aprovechaban los dispositivos móviles para extraer el código de seguridad y acceder a credenciales para los accesos a las cuentas bancarias, que les permitían el retiro de dinero de las víctimas, a través de cajeros automáticos, sin tarjetas electrónicas.

Los montos retirados oscilaban en $750, que luego eran trasladados a cuentas bancarias a nombre de Carlos Alexander Alvarado Saravia y Miguel Humberto Ramos Lemus, aseguró el investigador de la unidad de investigación de delitos informáticos, de la División Central de Investigaciones (DCI).

La Policía ha recibido al menos 13 denuncias de personas que fueron estafadas, pero podrían aumentar. Tienen información que existen más víctimas del interior del país.

El investigador pidió a la población que utiliza la banca móvil, a que cambien sus contraseñas para evitar ser víctimas de los piratas informáticos.

Sugirió que cuando lleven sus teléfonos a talleres de reparación desistalen las aplicación de banca móvil, para no ser objeto de ilícitos informáticos.

El investigador dijo que desde hace cuatro meses recibieron las primeras denuncias contra los implicados y desde entonces les dieron seguimiento.