Todo el país en alerta por tormenta Selma

La dirección general de Protección Civil emitió alerta naranja en ocho departamentos del país y alerta amarilla en el resto, por la llegada de la tormenta tropical Selma, hoy; asimismo, pidió a las Comisiones locales de Protección Civil, activarse y prepararse ante el fenómeno al que catalogó como “peligroso”.

“La declaratoria de alerta naranja en los departamentos de occidente se emite con el propósito que en las instituciones puedan tener, de manera justificada, la reorientación de sus presupuestos para atender cualquier situación que se presente en la población, es decir, que no puede haber carencia de la capacidad de recurso (ante la emergencia)”, dijo ayer el director de Protección Civil, Jorge Meléndez.

Los departamentos que desde ayer están en alerta naranja, por el mayor impacto de la tormenta, son: Santa Ana, Ahuachapán, Sonsonate, La Libertad, San Salvador, La Paz, San Vicente y Usulután.

Mientras que el resto de departamentos, es decir, Chalatenango, Cuscatlán, Cabañas, San Miguel, Morazán y La Unión, están en alerta amarilla.

Meléndez explicó que los pronósticos señalan que Selma no es un fenómeno prolongado, pero sí peligroso, durante unas 24 horas o más.

“Son las comisiones municipales y comunales de Protección Civil, nuestra principal garantía que enfrentemos la posibilidad de evitar víctimas; solo en el territorio es donde podemos ser capaces de analizar en detalle, la familia, la casa, el grupo que esté en una situación de riesgo inminente, ante las lluvias que se presenten y entonces, dependemos para ser altamente efectivos, de las decisiones muy definidas y firmes que tomen las comisiones municipales”, reiteró el también secretario de vulnerabilidad, Jorge Meléndez.

Hasta ayer, el pronóstico del Observatorio Ambiental del Marn, preveía que la tormenta tropical Selma impactara la zona occidental y central del país, principalmente.

“Las lluvias pueden ser intensas y torrenciales, además de presentarse vientos acelerados del sur de la franja costera, zona sur y zonas altas; además pueden generar condiciones de mar picado y un aumento del nivel del mar”, explicó la jefa del Observatorio, Celina Kattán.



A partir de mañana, los pronósticos del clima señalan la entrada de un nuevo frente frío, a partir de la tarde, pero con “aire seco”, y esperan que la tormenta ya se haya debilitado, para entonces.

Protección Civil activó 1,281 albergues a nivel nacional, con una capacidad para acoger a 340,000 personas; sin embargo, Meléndez dijo que hasta el momento, la mayor cantidad de personas albergadas han sido 62,000.

Meléndez instó a la población a seguir las indicaciones de las autoridades y a evacuar, si así se indica. “Si se les indica que hay que evacuar preventivamente, no deben dudarlo en ningún momento”, dijo.

Detener actividades agrícolas

Ante la tormenta Selma, el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirsa) recomendó detener todas las actividades agrícolas en el país, y en los países vecinos que pudieran resultar afectados por las lluvias.

“En la medida de lo posible, tratar de cosechar los productos conel grado mínimo de corte para la cosecha y almacenar semillas, granos y alimentos en general, en lugares secos y ventilados, aplicando tratamientos que eviten el aparecimiento de plagas”, dice un comunicado del Oirsa.

Recomendó poner a salvo a animales y prestar atención a enfermedades respiratorias que necesiten atención veterinaria.

 

¿Qué es una tormenta tropical?

 

Son los vientos rotativos que tienen en el centro una presión mínima, cuya velocidad ronda entre los 62 y los 117 kilómetros por hora.

“Todo inicia como una área inestable, después todo comienza a organizarse y pasa a baja presión, después de la baja presión se reclasifica a depresión tropical y después a tormenta tropical y si continúa su evolución a huracán”, explicó el meteorólogo, Saúl de la O.

Según el Centro Nacional de Huracanes, de Estados Unidos, la diferencia entre la baja presión, depresión tropical, tormenta tropical y huracán es la organización y fuerza de los vientos y con esto, la disminución de la presión atmosférica (peso que ejerce la atmósfera en un punto determinado) en el centro del fenómeno.