Pignato fue llevada a la audiencia especial desde un hospital del ISSS donde recibe atención médica. Óscar Machón.
La exprimera dama de la república, Vanda Pignato, negó recibir dinero del gobierno salvadoreño mientras enfrenta dos procesos judiciales, uno donde ha sido acusada de lavado de dinero y otro por simulación de delito.
"El gobierno no me da ni un centavo y mejor que vayan afuera y pregunten a las mujeres que están afuera ¿quién me está ayudando? son las mujeres de este país que me están ayudando a pagar mis cuentas, a salir adelante, entonces es mentira, no es verdad, por favor que la prensa no destaque una cosa que no es verdad. Yo les juro, yo no recibo ni un centavo del gobierno de El Salvador", dijo Pignato, quien llegó en silla de ruedas, en una ambulacia del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), a una audiencia especial donde el Juzgado Octavo de Instrucción debía poner medidas, según lo ordenó una Cámara.
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Pignato si confirmó que sigue siendo Secretaria de Inclusión Social y que regresará a su puesto al terminar los procesos: "Yo sigo como funcionaria, cuando salga de aquí y salga libre -porque voy a salir- es que yo voy a regresar a tener el puesto", dijo a la prensa esta tarde, al finalizar la audiencia especial de imposición de medidas, donde el juez resolvió que no existe peligro de fuga y no le decretó medida alguna.
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En la audiencia, la Fiscalía General de la República cuestionó que la procesada presentó una constancia donde indica que sigue siendo funcionaria y devenga $6,000 mensuales. Desde el pasado 8 de junio, la Fiscalía General de la República acusó a Pignato por el delito de lavado de dinero e inmovilizó sus cuentas y bienes. Ante esto, Pignato dijo que no puede tener a su hijo con ella, porque no puede mantenerlo.
En un segundo proceso, Pignato es procesada por simular delito. La Fiscalía dice que Pignato pidió investigar una supuesta falsificación de firmas en un contrato de compra y venta de un vehículo marca Lexus, al empresario Miguel Menéndez "Mecafé", sin embargo, el Ministerio Público dijo que las firmas eran verdaderas.