Los cancilleres del SICA, incluida la ministra Alexandra Hill, se reunieron en San José. Blinken también sostiene una reunión con los funcionarios del Triángulo Norte. Fotografías: Cancillerías de Honduras y República Dominicana.


El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, se reúne con la canciller salvadoreña, Alexandra Hill, junto a los ministros de relaciones exteriores de Guatemala y Honduras, para abordar las causas de la migración irregular en la región o Triángulo Norte.

Blinken aseguró hoy que juntos, Estados Unidos y los países del Triángulo Norte, pueden “promover la democracia, el buen gobierno, la seguridad y las oportunidades económicas”.

La funcionaria salvadoreña aún no informa de las reuniones sostenidas con el alto funcionario del gobierno estadounidense en San José.

Blinken también sostuvo una reunión con todos ministros de Relaciones Exteriores de Costa Rica, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Panamá y México, en una reunión del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).

A esta reunión también asistió el canciller sandinista Denis Moncada. Esta mañana, Blinken señaló que la prohibición al líder de la oposición nicaragüense Cristiana Chamorro “refleja el miedo de Ortega a unas elecciones libres y justas. Los nicaragüenses merecen una democracia real”.

De acuerdo a su portavoz, Ned Price, el secretario de Estado “hizo hincapié en la importancia de contar con instituciones democráticas sólidas y del compromiso con la lucha contra la corrupción, así como en la necesidad de que los Gobiernos sirvan a su pueblo”.

Los cancilleres “discutieron la estrategia de Estados Unidos para hacer frente a las causas fundamentales de la migración”.

Entre los temas tratados está la creación de oportunidades económicas para los centroamericanos, la reducción de la violencia y el combate a la pandemia covid-19 y el cambio climático.

Blinken subrayó, en el 20º aniversario de la Carta Democrática Interamericana, la necesidad de que todos los dirigentes se comprometan con la celebración de elecciones libres y justas, la buena gobernanza, la separación de poderes, el Estado de derecho, el respeto de los derechos humanos y unas reglas del juego equitativas en el terreno económico.

Blinken señaló que Centroamérica puede ser una región más fuerte si las personas y los países cooperan para hacer frente a los desafíos de manera conjunta, incluso con socios como México.