El presidente del Consejo Ejecutivo Nacional de ARENA (Coena), Jorge Velado, divulgó ayer un comunicado en el cual este partido considera que las órdenes de arresto contra 17 militares salvadoreños, señalados en el asesinato de los jesuitas, violan la soberanía de El Salvador.
En su cuenta de Facebook, ARENA tilda de “repudiable y condenable” y de “hoja de la vergüenza de nuestra historia” la masacre cometida contra los sacerdotes el 16 de noviembre de 1989. Argumenta que los autores de los crímenes ya fueron puestos “ante la justicia” y “condenados conforme a las leyes salvadoreñas”; que la decisión de “darle vigencia a hechos ocurridos durante el conflicto” lesiona la soberanía nacional y que “la etapa más trágica y dramática de nuestra historia ha sido superada”.
La vicepresidenta de Ideología de ARENA, Celina de Ávila, confirmó la legimitidad del comunicado y aseguró que los salvadoreños deben ver hacia el futuro, y reiteró que se trata de casos ya juzgados.
El diputado Juan Valiente, del partido ARENA, aseguró que la fracción del partido de derecha emitió su propio comunicado. “Tenemos un problema legal complicado, el terrible asesinato de los jesuitas ya es cosa juzgada y condenada, además tenemos una ley de amnistía, los hechores han sido beneficiados”, opinó, refiriéndose a la Ley de Amnistía para la Consolidación de la Paz, aprobada en 1993 luego de la publicación de la Comisión de la Verdad. “Lo que más nos interesa es ver hacia adelante”, reiteró.
Sin embargo, Valiente consideró que los salvadoreños tienen “sed de poder conocer la verdad” de muchos casos y cree que por eso reviven casos como el de los jesuitas.
El juez Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional de España, reiteró el 5 de enero, a la Policía Internacional (Interpol), las órdenes de arresto contra los militares salvadoreños que había emitido desde agosto de 2011, cuando la Corte Suprema de Justicia consideró que éstas se limitaban a la ubicación y localización de las personas requeridas.
Cuenta del presidente del COENA
Plantea tres argumentos: ya se juzgó, se lesiona la soberanía y la necesidad de superar la etapa “más trágica” de la historia del país.
