Durante la emergencia, comisiones del Órgano Legislativo han solicitado informes a los funcionarios del Ejecutivo. / DEM


El presidente de la Asamblea, Mario Ponce, sostuvo que no se prestará a cerrar la Asamblea Legislativa, luego de el diputado Guillermo Gallegos dijera que varios diputados y empleados están contagiados de covid-19.

El Sindicato de Empleadas y Empleados de la Asamblea Legislativa (Seal) advirtió el sábado que la Asamblea Legislativa “se está volviendo un foco de infección que pone en peligro las vidas, no solo de sus colegas, sino de todos los empleados y colaboradores”, exigiendo una cuarentena en todo el territorio nacional.

El 27 de marzo, este Sindicato hizo un llamado a los trabajadores de la Asamblea Legislativa a suspender labores, advirtiendo que se pone en riesgo “la salud y la vida de muchos empleados al no prorrogar” la suspensión de garantías constitucionales.

Gallegos consideró a la Asamblea como una “fuente de contagio fuerte” en donde “unidades completas han salido positivas” luego de la realización de pruebas miércoles y jueves de la semana pasada. “Mientras más se tenga aperturada la Asamblea, más complicado se vuelve. Lo que se busca es erradicar el virus de la Asamblea”, expresó.

El diputado de Gana mencionó que “Norman Quijano no tiene nada qué hacer por acá pero se atraviesa a cualquier momento para que lo entrevisten”.

El diputado Norman Quijano (Arena) dijo que no paralizarán la Asamblea, de lo contrario, considera, el manejo de la emergencia se convertiría en una piñata, ya que continuamente se conocen irregularidades en compras de insumos para combatir la covid-19. “No vamos a parar”, advierte, luego de mencionar publicaciones en donde se ha conocido vínculos entre funcionarios públicos y proveedores del Estado.

El subjefe de fracción del FMLN, Schafik Hándal, cree que hay una “una campaña por paralizar la Asamblea, tal como intentaron el 9 de febrero”. Cuestionó las publicaciones en sitios afines al Gobierno que aseguran que un 90 % de empleados de la Asamblea Legislativa están contagiados cuando hay más de 4,000 empleados en esta.

El presidente de la Asamblea, Mario Ponce, aseguró que no se prestará a paralizar al órgano legislativo de El Salvador porque el es un demócrata. “Si van con el objeto de cerrar el órgano legislativo, esa persona está cometiendo un delito grave al país, porque está atentando con era nuestro orden democrático”, advirtió.

El Poder Ejecutivo insiste en que la Asamblea Legislativa debe aprobar un régimen de excepción temporal por 15 días en todo el territorio nacional que permita una cuarentena estricta para evitar mayor propagación de la pandemia.