“Como Presidente de la República, mi responsabilidad es cumplir la ley y hacer cumplir la ley, así que definitivamente no podemos sentarnos a negociar con los capos o con las pandillas directamente”, aseguró el aspirante el 16 de diciembre, durante el debate presidencial realizado en la Universidad de El Salvador (UES).
El candidato opositor señaló que ha trabajado con jóvenes en riesgo a través de la Fundación Calleja, por lo que ha logrado identificar sus necesidades: educación y oportunidades de trabajo. “Vamos a articular las fuerzas de todo un país, de todo un Estado, para construir una ruta que ellos puedan trazar, para construir una mejor vida en El Salvador y no tener que buscarla en las pandillas”, explicó.
Sin embargo, su compañera de fórmula, Carmen Aída Lazo, no rechaza tajantemente el diálogo con estas estructuras, siempre que se dé en “condiciones de transparencia”, según destacó el 26 de septiembre de 2018, durante el conversatorio “Perspectiva sobre Seguridad Ciudadana 2019-2024”, organizado por las Naciones Unidas y el Consejo de Seguridad Ciudadana y Convivencia (CSCC).
“Yo sí soy muy creyente del diálogo, pero un diálogo con transparencia. La tregua tuvo ese potencial, pero haberlo hecho sin transparencia hizo que la población rechazara; no vamos a desechar nada que pueda funcionar”, afirmó entonces.
Dentro del plan de Gobierno de ARENA, no hay ningún apartado que estime establecer un diálogo con estos grupos. En el portal www.carloscallejapresidente.com están detalladas las propuestas “Inversión social focalizada” y “Escudo Inteligente”, enfocadas en la prevención.