El presidente del partido Nuestro Tiempo, Juan Valiente, cree que las elecciones de 2021 deben ser una ratificación de la democracia en El Salvador. Duda que el presidente de la República, Nayib Bukele, haya leído la Constitución de la República, de quien dice tiene “poca educación democrática”. Su partido propone un sistema nacional anticorrupción en donde la Cicies pueda colaborar.
¿El gobierno de Biden marca agenda de lucha anticorrupción y transparencia?
Por supuesto. Han identificado la corrupción como un cáncer y por eso creo que la lucha contra la corrupción, la transparencia y fortalecer las instituciones democráticas va a ser un criterio importante en las relaciones internacionales.
¿Cómo describiría la coyuntura actual?
Yo espero que la institucionalidad de El Salvador comience a funcionar. Estamos esperando que estas investigaciones consoliden evidencias para que la Fiscalía presente los recursos para que los ministros involucrados rindan cuentas ante los tribunales.
El ministro ha anunciado una unidad para combatir la evasión en los paraísos fiscales. ¿Esta lucha y la de Fiscalía es auténtica o es una lucha política?
Yo creería que las acciones de la Fiscalía General de República son acciones judiciales vinculadas al marco jurídico del país, no las identificaría como lucha política, sin embargo, las declaraciones del Gobierno de El Salvador siguen el patrón de lucha política especialmente en este momento preelectoral.
El tema de la evasión en El Salvador es un tema bastante complejo y no siempre el discurso de que los máximos evasores son los más ricos es un discurso totalmente cierto.
Hay cosas que deben hacerse y no pasa por crear una unidad de investigación adicional. Lo que tiene que hacerse es cambiar ciertas regulaciones legales respecto del marco tributario. Por ejemplo, si el impuesto de referencia para las empresas es 30 %, ¿por qué entonces los servicios que las empresas pagan para empresas internacionales pagan el 25 %?, deberían pagar el mismo 30 y el que pague el 25 puede permitir que haya algunas empresas que hagan un uso indebido de estas contrataciones internacionales para beneficiarse con ese 5 %, probablemente son la minoría pero ciertamente se da.
También, en las personas naturales, a mayores ingresos pagamos más impuestos. Lo que no sucede en las personas jurídicas, a mayor ingreso se paga porcentualmente menos impuesto, ¿y en manos de quién está cambiar esas regulaciones?, en manos del ministro de Hacienda. En lugar de estar gastando miles y miles de dólares en una nueva unidad, debería hacer propuestas concretas para que el marco tributario sea más progresivo y no regresivo. No se dan cuenta que las grandes empresas son las entidades más fiscalizadas que hay en el país, son menos de 100, tienen auditores fiscales casi permanentemente en sus instalaciones vigilando las operaciones, la gran evasión fiscal ocurre con el pago del IVA y con el pago del IVA somos todos los responsables. A veces, los discursos responden a la lucha política y no a un enfoque regional, busca generar más adeptos, qué es lo que más likes, que diga que los ricos van a pagar más impuestos.
“De acuerdo a las encuestas podríamos tener un piso de unos seis o siete diputados pero podríamos llegar a 12... Cuando llega un grupo político, que decide usar los recursos públicos para campaña, ciertamente es una lucha desigual y difícil”.
¿A qué ley sería la reforma?
En las leyes tributarias, están determinadas todas las excepciones que algunas actividades generan y cuando uno evalúa el impacto es un impacto realmente importante, podría llegar a ser un 20 % del ingreso nacional, si nosotros revisáramos algunas excepciones que tiene el pago de la renta.
Pero más allá de eso, también es importante que el Ejecutivo no solamente se concentre en recaudar mejor y más impuestos, el Ejecutivo debe concentrarse en cómo gastar mejor los impuestos y cómo garantizar que de esos impuestos no va a haber robos como los que ha habido recientemente, no va a haber despilfarros como los que siguen habiendo en el Ejecutivo y otros órganos de Estado, va a haber una priorización en educación y salud. No solo se trata de recolectar más, sino también saber cómo gastar para garantizarle a los salvadoreños que no haya corrupción, de los que tenemos tantos indicios, y que se invierta en la gente y no en los privilegios de los funcionarios.
Usted sabe que yo luché durantemente contra el seguro médico privado de la Asamblea Legislativa. En mayo de 2015 solamente dos diputados de los 84 no tomamos el seguro médico privado, Johnny Wright y yo, los otros 82 todos suscribieron el seguro. No les parecía que era un beneficio indigno, un privilegio indebido de funcionarios públicos cuando la gente tiene un sistema de salud deficiente. Lo que tenemos que hacer es quitar toda esa grasa del Estado que todavía gozan muchos de los funcionarios.
Entonces, el ministro de Hacienda debería decir ahora voy a rendir cuentas, ahora voy a decir cuánto he gastado en el Hospital El Salvador, ahora voy a decir por qué he pagado demás en algunas asignaciones de las licitaciones del Hospital El Salvador, que no solo satisfaga el morbo de los salvadoreños diciendo que va a perseguir a los evasores, lo cual es correcto, sino que haga bien su trabajo, gastar con celo esos centavos de los impuestos en beneficio de los más necesitados.
¿A qué se refiere con el despilfarro de este Gobierno?
El presupuesto de 2019 y 2020 fueron muy similares a los presupuestos anteriores. Cuando se criticaba al Gobierno el uso de la partida secreta o los gastos reservados en el 2019, el del 2020 tiene los mismos errores. Nosotros propusimos una ley especial de ahorro y austeridad que eliminaba los seguros médico privados en todo el Estado, no solo en el Ejecutivo, Legislativo y Judicial, sino incluso en las instituciones autónomas, eran como $70 millones.
También pedíamos evitar el crecimiento del número de plazas. La partida de viáticos y viajes es exorbitante. Uno prácticamente sin salir del país puede averiguar de cualquier cosa, participar en cualquier reunión, no necesita estar viajando, hay muchas partidas que podríamos tomar como parte de la medicina amarga que necesita El Salvador. La gente no vive de burlarse de los políticos, no debería disfrutar insultar en las redes, la gente debería disfrutar cuando reciba el servicio adecuado de salud. A eso debemos apostarle.
La figura de Bukele genera diferentes reacciones, desde quien lo considera un líder regional hasta quienes lo consideran un dictador. ¿Cuál es su opinión?
Yo reconozco el liderazgo cuando lo veo y normalmente usted ve a los líderes ponerse al frente de los equipos de trabajo para generar una inercia que dé los resultados que uno está esperando. A mí me parece lamentable que en este Gobierno sean el ministro de Salud, Hacienda y el director de la Policía Nacional Civil los que estén en problemas con la Fiscalía General de la República por haber recibido y ejecutado órdenes ilegales de un Presidente. A los que vemos ahorita que están cosechando problemas legales por haber violado la Constitución son a los funcionarios de Bukele y yo todavía no he visto al Presidente salir en su defensa, salir diciendo que él dio las órdenes y que de ser necesario él enfrente la justicia como manda la ley de la República. Sin embargo, ha permanecido en silencio. Ahorita las investigaciones en las compras con indicios de corrupción para los insumos en la lucha contra la pandemia parece que están profundizándose y solicitó retirar el fuero impuesto por un nombramiento extraño de un segundo viceministro de Seguridad.
“No se dan cuenta que las grandes empresas son las entidades más fiscalizadas que hay en el país, son menos de 100, tienen auditores fiscales casi permanentemente, la gran evasión fiscal ocurre con el pago del IVA”.
¿Le ve indicios autoritarios?
Lo que pareciera es que el Presidente tiene poca educación democrática. No sé si ha tenido la oportunidad de leer la Constitución de la República sobre la cual juró ser Presidente y en nuestro marco constitucional las funciones están delimitadas y debidamente delimitadas y precisamente eso fortalece la democracia en el país. Para darle un ejemplo, un funcionario solo puede hacer lo que la ley le manda. Van a encontrar en la Constitución ninguna que indique que el presidente de la República tiene la potestad de iniciar un proceso de reforma constitucional. Un funcionario no puede excederse en las funciones que manda la Constitución de la República y eso debería ser tan evidente para los que estamos en la política es algo que parece no es relevante para el Presidente. Una de las cosas importantes de los verdaderos líderes es reconocer los márgenes de acción y a veces se ha excedido en la toma del Salón Azul cuando fue acompañado por un despliegue innecesario y excesivo de militares.
¿Responde a una retórica electoral o son muestras de auténtico autoritarismo?
Si el presidente se encuentra haciendo campaña electoral, pues, obviamente también está haciendo algo que no le manda la Constitución y que precisamente prohíbe la Constitución a los funcionarios públicos, cuando llega a la Presidencia debería reconocerse como líder electo de todos los salvadoreños y gobernar en beneficio de todos, de los que votaron por él y de los que no votamos por él.
¿Qué se juega en las elecciones de 2021?
Yo creo que en estas elecciones, así como en los Acuerdos de Paz, se está jugando el futuro del país. Podríamos poner en peligro precisamente este marco constitucional y este sistema de Gobierno y por eso es importante el 2021. El 2021 debería convertirse en una ratificación de todos los salvadoreños y salvadoreñas en favor de la democracia, nosotros creemos en el sistema de democracia participativa que tenemos, creemos en la separación de poderes, en el balance de poderes y en el Estado de Derecho y eso es importante para el 2021. Independientemente de cómo vote cada uno, yo creo que eso es lo que está en juego y que ojalá, así como ese 31 de diciembre de 1991, se firmó previamente en el acuerdo de paz en Naciones Unidos ratificado el 16 de enero de 1992, ojalá el 28 de febrero de 2021 los salvadoreños logremos decirle al mundo se cree en la democracia y se apuesta por la democracia.
¿Qué diferencia a Nuestro Tiempo de Arena y FMLN?
Aunque hayamos tenido poca experiencia política, porque solo Johnny y yo hemos sido funcionarios, ciertamente lo que hemos demostrado es coherencia. La coherencia es que uno actúa como lo que dice, no que dice lo que sea para tener más likes en redes sociales y después hace lo contrario, no. Nosotros desde el inicio hemos estado en contra del abuso de los recursos públicos y por eso no nos suscribimos al seguro médico privado de salud de la Asamblea Legislativa, por eso en la Junta de Vigilancia Electoral (JVE) de la que somos parte como partido político no hemos aceptado los celulares que todos los años se los cambian de alta gama y logramos reducir el presupuesto de elecciones en cerca de $80,000 reduciendo $50,000 que se gastaban en 30 noches de hotel de lujo para todos los miembros de la JVE. Hemos sido coherentes. Somos profundamente transparentes y le apostamos a la transparencia.
¿Quiénes son los donantes de Nuestro Tiempo?
Hemos llegado a tener 700 afiliados y una de las obligaciones de los donantes es donar, todos los afiliados estamos obligados a aportarle al partido, además tenemos personas naturales y jurídicas. El listado completo se encuentra disponible en el portal de transparencia de Nuestro Tiempo.
¿Hay alguna regla para aceptar o rechazarlos?
Hacemos una debida diligencia de los donantes para garantizar que vengan de fuentes lícitas. En algún momento no podemos hacer la debida diligencia, pues, no aceptamos la donación y, encima de eso, creemos que los donantes del partido sean personas naturales o jurídicas que crean en el proyecto político, nosotros no estamos en la búsqueda de apoyos para hacer favores o privilegios, estamos en la búsqueda de apoyos para lograr convertir a El Salvador en un país con un desarrollo económico basado en el conocimiento, con una inversión importante en desarrollo humano, salud y educación, de manera que nuestra gente, la gente menos beneficiada por el desarrollo del país, pueda gozar de un desarrollo humano del cual todos podamos estar orgullosos.
¿Cuáles son las luchas irrenunciables de Nuestro Tiempo?
Estamos trabajando con el grupo de candidatos pero desde antes teníamos algunos proyectos políticos, pero de lo más relevante, recientemente presentamos el sistema nacional anticorrupción.
Creemos que es una señal preocupante que en un momento de pandemia, con regulaciones relajadas y con la mayor disposición de dinero que nunca ha tenido un Gobierno en los años recientes, se hayan incrementado las denuncias de corrupción y se hayan visto mucha más evidencias de posible corrupción que en años anteriores.
También venimos acumulando hechos de corrupción como los del expresidentes Funes y Saca.
Hemos propuesto que se cree un plan para tener un sistema nacional anticorrupción, que incluya a la Fiscalía, mejorar el nivel del equipo de la Fiscalía que lucha contra la corrupción, convertir ese grupo de trabajo en una dirección a nivel de la Fiscal, buscar la manera de que el financiamiento para esa dirección sea internacional y pueda garantizarse mejores condiciones no solo salariales sino de recursos para toda la unidad, y en esa unidad pueda la Cicies colaborar de manera que podamos construir casos más sólidos. También hemos propuesto que haya juzgados especializados en el tema de corrupción, que haya un fortalecimiento en la rendición de cuentas.
Nos parece indebido que en el presupuesto 2021 este Gobierno intente reducir los presupuesto de la institucionalidad que hemos estado usando para denunciar los abusos, como el IAIP (anterior), del Tribunal de Ética Gubernamental y de otras instituciones que buscan garantizar con el uso de recursos públicos.
Y por último que se cuente con un observatorio ciudadano para garantizar el seguimiento de los casos de corrupción, adicionalmente tenemos que garantizar que el uso de los recursos responda a las expectativas de priorizar el desarrollo humano, eso significa garantizar mejor presupuesto en educación y salud, pero no a cuenta de más préstamos en el país, porque cada centavo prestado es un centavo menos en el futuro, porque todos los ciudadanos cuando compramos estamos pagando impuestos. La gran mayoría de impuestos los pagamos los salvadoreños que tenemos un salario o los que están trabajando en la economía informal. Si el Estado sigue una política de endeudamiento irracional nos va a pasar la factura a nosotros y ese centavo que disfrutamos va a ser un centavo menos para nuestros hijos. Que no haya despilfarro, entrar a un régimen estricto de ahorro y austeridad.
También, creemos que debe fortalecerse el respeto de los derechos, los derechos humanos políticos, civiles, deben respetarse celosamente, la democracia funciona cuando funciona para todos, no se trata de promover un sistema en el cual la minoría seamos sujetos a una dictadura de la mayoría, sino que nuestro régimen constitucional garantiza que las minorías tengan derechos y que esos derechos son innegociables y que esos derechos deban ser respetados por el Estado.
¿A cuántos diputados aspiran?
Queremos tener bastantes diputados. Estamos presentando 55 candidatos a diputados propietarios en seis departamentos. De acuerdo a las encuestas podríamos tener un piso de unos seis o siete diputados, pero podríamos llegar a 12 diputados. Cuando los salvadoreños escuchen a Nuestro Tiempo, va a convertirse en una alternativa en la cual puedan confiar.
Perfil
Juan Valiente, presidente de partido Nuestro Tiempo
Profesión: Profesional en tecnología y educación.
Trayectoria política: Diputado de la Asamblea Legislativa del periodo 2015-2018. Renunció de Arena en mayo de 2019. Desistió de la reelección como diputado en 2017 junto a Johnny Wright.
Antecedentes: En la Asamblea Legislativa logró liberar información pública de la planilla legislativa, nombres y salarios.
https://www.youtube.com/watch?v=kcNcLR8w7rs&feature=youtu.be