El refuerzo de la capacidad de las fiscalías del Triángulo Norte, la reforma a las instituciones judiciales y las elecciones limpias de magistrados de la Corte de Cuentas son algunas de las recomendaciones que hizo el Consejo del Atlántico a los gobiernos de Honduras, Guatemala y El Salvador, así como al de Estados Unidos.
Estados Unidos es el principal cooperante del plan Alianza para la Prosperidad que diseñaron e impulsan los gobernantes de El Salvador, Honduras y Guatemala.
Las recomendaciones del informe del Centro de América Latina “Adrienne Arsht” del Consejo Atlántico giran en torno a una encuesta de CID-Gallup realizada en los países del Triángulo Norte en agosto y septiembre de 2016, que indica que el 75 % de la población de estos tres países centroamericanos no creen en “sus gobiernos, en sus instituciones, en sus líderes”.
El informe recomienda al Gobierno de Estados Unidos dirigir financiación a fiscalías con escaso personal. “Los Estados Unidos deberían proporcionar fondos para la contratación y capacitación de fiscales adicionales y para fortalecer unidades especializadas que procesen la corrupción, el lavado de dinero, el narcotráfico, el crimen organizado y otros casos complejos”, reza el informe.
Sugiere también, que abogados del Departamento de Justicia de Estados Unidos “podrían ser incorporados para servir como guardianes”.
Sostiene que los jueces y fiscales “necesitarán más protección física adicional” para mitigar las “amenazas que vienen acompañadas de una acción más concertada”.
El informe indica que más del 66 % de la población apoyó la creación de un órgano de tránsito para combatir la corrupción y mejorar la administración de justicia; y recomendó continuar los esfuerzos para reformar las instituciones, incluyendo acuerdos entre asesores internacionales de Estados Unidos y otros para ayudar a los jueces y fiscales a aclarar la acumulación de casos.
Pide Reforma Fiscal
Los gobiernos centroamericanos deben “crear estrategias integrales” para reformar los regímenes tributarios y “eliminar las distorsiones que favorecen a ciertos grupos” con el objetivo de “ampliar la base imponible”, indica el centro de América Latina del Consejo del Atlántico.
Sostiene que, si bien El Salvador “ha avanzado en la recaudación tributaria en la última década”, critican que “actualmente tiene la mayor deuda pública de Centroamérica y la segunda más grande de América Latina, seguida de cerca por Honduras.