El análisis de dos exfuncionarios salvadoreños que han trabajado de cerca con el Gobierno estadounidense plantea dos escenarios para El Salvador durante la administración de Donald Trump: uno en el cual se esperan giros no solo en la política migratoria estadounidense hacia El Salvador, sino en las condiciones para la cooperación; y otro en el cual la política estadounidense se mantendrá casi intacta.

La exvicecanciller para los salvadoreños en el exterior, Margarita Escobar, cree que la frase de Trump “Estados Unidos será la prioridad”, en su discurso de toma de posesión, quiere decir que revisará toda la agenda internacional y acomodará todos los cambios en los que considere que Estados Unidos se encuentra en desventaja.

“Para El Salvador, el tema migratorio va a ser un asunto verdaderamente delicado” dice y sostiene que esta política puede afectar tanto a la migración hacia Estados Unidos, como en la situación de los compatriotas que viven en el país norteamericano sin resolver su estatus migratorio. Escobar fue vicecanciller de El Salvador para los salvadoreños en el exterior y fue embajadora representante permanente ante la Organización de los Estados Americanos (OEA). Ahora es diputada de la oposición (ARENA).

Luego de escuchar el discurso del nuevo presidente estadounidense, llama a El Salvador a “estar listo” a tener un “plan” y a armar las primeras visitas que le llevarán a informarse de los primeros cambios con el nuevo Gobierno estadounidense.

Sin embargo, no solo el tema migratorio llama la atención de la exvicecanciller, sino también la cooperación y los requisitos adicionales que puedan surgir. “Tendríamos que prestar oídos a esos proyectos de cooperación bilateral”, recomienda.

Los giros en las políticas comerciales estadounidenses pueden llegar a ser un tercer tema importante para El Salvador, según Escobar, quien cree que las modificaciones al Tratado de Libre Comercio son previsibles porque la administración Trump ha dicho que el tratado afecta a los Estados Unidos.

Su análisis también prevé una acentuación a la política de seguridad regional, especialmente para evitar desestabilización o vulneración a sus fronteras o seguridad.

La actual legisladora sostiene que no se puede predecir todo, pero aseguró que los cambios en estas cuatro áreas son previsibles y racionales. “Debemos estar preparados para negociar, con equipos multidisciplinarios, que se mantengan atentos”, insta.

Pero el excanciller de la República, Óscar Santamaría, no ve cambios bruscos para El Salvador y cree que hay que esperar. Sostiene iniciativas regionales como el plan Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte y los fondos de la Cuenta del Milenio son compromisos de Estado de Estados Unidos. “No creo que eso sea lo que el presidente nuevo va a cambiar”, dice.

Santamaría no cree que Trump dé marcha atrás a la prórroga al Estado de Protección Migratoria (TPS) porque ya fue firmado por el gobierno anterior. Al excanciller le parece lógica la postura de Trump ante la migración ilegal y a personas con antecedentes penales; sin embargo, está a la expectativa y dice que no cree que haya “medidas favorables”. “Tiene razón el presidente de Estados Unidos de asumir un comportamiento de esa naturaleza, ¿a quién le va a gustar que llegue gente que le acusan de delitos?, a nadie”, expresa.

Sin embargo, el exfuncionario reconoce que está en duda la reforma migratoria, que fue una promesa de campaña del expresidente Obama.

 

Evitar dobles discursos

Uno de los aspectos que, según la diputada Escobar, debería evitarse en el Gobierno del FMLN es el doble discurso o las dobles lealtades en la política exterior. Ella cree que la administración Trump será “menos tolerante” hacia alianzas de dos sentidos, con “gobiernos antidemocráticos y con el gobierno de Trump.

“Eso va a suponer una condición nueva en cómo el gobierno del FMLN maneja sus relaciones con Venezuela, Nicaragua, con Cuba. Ya él advirtió que revisará las agendas bilaterales con estos países”, señala.

 

Posibles giros en la gestión Trump

 

Migración

El presidente de los Estados Unidos ha anunciado que hará deportaciones a migrantes sin documentos y a migrantes con antecedentes delictivos. Esta postura no es alarmante para muchos si parten que la administración anterior tuvo récord en deportaciones de indocumentados.

 

Cooperación

La opinión generalizada es que los programas regionales no se debilitarán porque son políticas de Estado; sin embargo, se cree que Estados Unidos podría aumentar sus condiciones, dependiendo de los énfasis específicos que tenga la gestión del presidente republicano Donald Trump.

 

Comercio

Un cambio previsible, según la exvicecanciller, son modificaciones al tratado comercial, algo que ha sido afirmado por el nuevo gobernante estadounidense.

 

Seguridad

La mayoría cree que la política de seguridad seguirá firme, incluso, con un probable aumento de énfasis en función de asegurar las fronteras y la seguridad nacional de los Estados Unidos.