Esta medianoche, el Gobierno pierde la vigencia del decreto legislativo 593 de emergencia nacional que le permite movilizar recursos y realizar compras directas, sin licitación, en el manejo de la propagación de la pandemia del COVID-19 dentro de El Salvador.
La Asamblea Legislativa prepara un nuevo decreto junto al Poder Ejecutivo que declararía una nueva emergencia nacional, una cuarentena domiciliar y permitiría reactivar la economía luego de la cuarentena.
Sin embargo, los desacuerdos tienen entrampado el debate, que ya vivió los primeros gritos, exaltaciones y llamados al orden, en medio de acusaciones del presidente Nayib Bukele, contra los diputados y la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP).
La Sala de lo Constitucional les dio hasta hoy, 29 de mayo, para acordar esta nueva ley, pero legisladores y funcionarios del Ejecutivo no solo difieren sobre la declaratoria de emergencia nacional sino sobre cuánto tiempo durará la última cuarentena y en cuánto tiempo permitirán a las empresas e instituciones volver a sus labores.
Arena, FMLN y PDC propuso en la mesa reanudar la economía, gradualmente y con medidas sanitarias, el lunes 8 de junio, dejando una cuarentena de 10 días.
El Ejecutivo, aclarando que no cederá en su postura, pide reanudar la economía el viernes 13 de junio, dejando una cuarentena de 15 días.
Los primeros tienen el argumento de que muchas personas microempresarias y trabajadores por cuenta propia necesitan salir a trabajar porque ya no tienen qué comer, los segundos le apuestan a bajar la curva de COVID-19.
Independientemente de la decisión de la Asamblea Legislativa, el presidente les advirtió este 28 de mayo en un tuit: “No habrá apertura de nada, sin antes bajar la curva”, “Antes, tendrán que pasar por encima de este servidor”.
La tesis del Gobierno es que una cuarentena de 15 días, bien aplicada, cortaría la transmisión, porque la enfermedad tiene su mayor carga viral en el día 10 y disminuye en el día 15, disminuyendo la capacidad de transmisión. Ello, según la explicación que llevó el ministro de Salud, Francisco Alabí, a los diputados. Alabí sostuvo, sin embargo, que ninguna medida frenará el COVID-19.
Gobierno y partidos prometen mantenerse en la mesa
Luego de fuertes exabruptos entre el secretario privado de la Presidencia de la República, Ernesto Castro, y el diputado Alberto Romero, de Arena, en el diálogo por la ley de emergencia, cuarentena y reactivación económica, las partes mostraron su voluntad de seguir dialogando.
El Gobierno, sin embargo, consideró que su posición no puede moverse, debido a que únicamente 15 días de una cuarentena bien aplicada bajarían la curva de los contagiados por COVID-19.