Muchos latinoamericanos que viven en Estados Unidos protestaron contra las promesas de Donald Trump. / DEM


El ministro de Relaciones Exteriores de El Salvador, Hugo Martínez, considera que la relación entre el Gobierno salvadoreño y la nueva administración estadounidense que asumirá el 20 de enero de 2017 “es un desafío” no solo para la política exterior de El Salvador, sino para el mundo.

“Tenemos que encontrar los caminos para trabajar con esas nuevas autoridades”, advirtió el miércoles.

Pese a esta dificultad, el jefe diplomático dijo que el Gobierno buscará “sostener el buen nivel de relación con Estados Unidos” e incluso de “fortalecerlos con la persona que ha sido electa”, refiriéndose a Donald Trump, quien el martes le ganó la contienda presidencial a Hillary Clinton.

Así, el canciller instruyó a la embajadora salvadoreña en Washington a contactarse con el equipo de transición designado por Trump.

Martínez dijo que debía comenzar a trabajar “en lo que sería una nueva era de la relación entre El Salvador y Estados Unidos con las autoridades que han sido electas”.

El Salvador proyecta intentar convencer a la próxima administración de aprobar un nuevo Estado de Protección Migratoria (TPS) cuando éste se venza, el 9 de marzo de 2018, o de proponerle alternativas para los salvadoreños.

El Gobierno intentará lograr que “en un diálogo profundo con la nueva administración” encontrar “una buena alternativa” para los compatriotas: “Puede ser una nueva prórroga u otras alternativas migratorias que estaremos poniendo sobre la mesa”, señaló el jefe diplomático. Ayer, el asesor migratorio Reynaldo Alvergue dijo que el Gobierno actual, del FMLN, debe hacer mucho “lobby” y un buen acercamiento con el Ejecutivo. “Va a tener que dejar incluso arreglado asegurar un próximo periodo del TPS”, aseguró.

En todo caso, el canciller instó a los salvadoreños estén tranquilos ante el gobierno de Trump.

“Quiero enviar un mensaje de tranquilidad a nuestros compatriotas, en el sentido que el Gobierno de El Salvador tiene un compromiso muy grande para luchar por sus derechos y vamos a trabajar con esta nueva administración en Estados Unidos, no solo en el Ejecutivo sino también en el Congreso, para velar por que los derechos de nuestros compatriotas sean respetados en los Estados Unidos, independientemente de su condición migratoria”, advirtió. Su mensaje, de pedir respeto a los derechos humanos de los salvadoreños, fue respaldado el miércoles por todos los partidos políticos.

El Salvador es uno de los tres países, junto a Guatemala y Honduras, beneficiarios de $750 millones del presupuesto 2016-2017 de los Estados Unidos, como cooperación al plan Alianza para la Prosperidad.

El presidente estadounidense Barack Obama, quien concluye sus funciones el 20 de enero de 2017, ha solicitado al Congreso de los Estados Unidos una cooperación de $1,000 millones para el año fiscal siguiente, con el objetivo de que la región fortalezca instituciones, seguridad y economía, y la emigración ilegal hacia Estados Unidos se logre contener.

 

 

¿Qué dijo Trump?



Deportación

Dijo que deportaría 11 millones de inmigrantes indocumentados de Estados Unidos; cuando visitó México, moderó su postura y dijo se enfocaría en personas con antecedentes penales.

 

Plan DAPA

El empresario también dijo que eliminaría el amparo concedido ante la deportación a favor de padres de ciudadanos y residentes legales permanentes (DAPA, por siglas en inglés).

 

Plan DACA

Otro programa bajo la mira del presidente electo es el llamado DACA, que favorece a jóvenes que entraron siendo niños y están

protegidos por la Acción Diferida de 2012.

 

Comercio

Trump aseguró que renegociaría los tratados de libre comercio, porque los considera perniciosos para la economía estadounidense. Intenta volver a un enfoque proteccionista del comercio.